Cansington fue una antigua capital cultural con una larga historia.

Solía ser la capital de ocho dinastías en el pasado.

La Calle Médica era la atracción de Cansington.

Además, también estaba la Calle de las Antigüedades.

La Calle de las Antigüedades también era una zona animada. Había cientos de tiendas de antigüedades ubicadas en la calle. Algunas eran incluso tiendas de hace cien años.

James y Cynthia llegaron juntos a la Calle de las Antigüedades.

Las calles estaban llenas de puestos.

Había muchas antigüedades y pinturas expuestas en estos puestos.

Algunos clientes se agachaban en el suelo y seleccionaban cuidadosamente los productos, con la esperanza de obtener las mejores ofertas.

“James, ¿sabes mucho sobre antigüedades?”, preguntó Cynthia mientras seguía a James y observaba las calles.

James sacudió la cabeza. “No”.

Él llevaba diez años en el ejército. Todo lo que hacía era un entrenamiento especial todos los días. Lo único que enfrentó en el pasado fueron armas asesi