La providencia tenía una cualidad ilusoria. No se podía ver ni tocar la providencia. Los cultivadores ordinarios ni siquiera podían sentirla. La providencia solo se hacía visible para aquellos que habían adquirido un alto grado, como el mismo James. Absorber la providencia tenía múltiples beneficios, entre ellos una mayor eficacia durante la cultivación.

James también estaba interesado en absorber la providencia. Sin embargo, no quería absorberla toda, pues eso solo convertiría el universo en un montón de escombros.

De hecho, eso fue lo que le ocurrió al Duodécimo Universo. Hadad bloqueó la providencia, haciendo que el Duodécimo Universo quedara privado de su capacidad para dar a luz a un Dios Ancestral del Macrocosmos. Para ello, había que liberar la providencia del Monte Camino Celestial, y devolver al Duodécimo Universo la providencia dominada por otras figuras poderosas.

"¿Providencia? ¿Qué es eso?". Preguntó Quanesha. Estaba confusa. Su grado era demasiado bajo para entender es