“¿Y cuántos artistas marciales de segundo y primer grado tienes?”, preguntó Maxine.

Thea respondió: “Cuento con treinta y seis de segundo grado y setenta y dos de primero”.

Como James estaba en peligro de muerte, Thea le contó a Maxine todo sobre el Palacio del Dios-Rey. Creía que Maxine era mejor que ella elaborando planes. En ese momento, estaba perdida. Solo sabía que tenía que confiar en Maxine para salvar a James.

“¡Uf!”. Maxine respiró hondo antes de decir: “Es más que suficiente”.

Aunque ella no sabía lo poderosos que eran los Blithe, podía suponer por el temor de su abuelo que eran comparables a los Caden. No solo eso, la familia Blithe tenía a alguien que podía enfrentarse a Tobias.

“Pero dijiste que incluso Tobias le teme a los Blithe, y él es un artista marcial de séptimo grado. Si intervienen, nuestros hombres de cuarto grado no tendrán ninguna oportunidad contra ellos”. Thea estaba dudosa.

Maxine se quedó pensativa. Mientras tanto, Cynthia las miró a ambas.

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