Lily asintió con la cabeza de inmediato y entró en el auto de Justin una vez que escuchó que Justin mencionaba que conocía bien el Nuevo Mundo. Ella dijo en voz baja: "Vamos. Nos iremos ya".

Justin estaba tan feliz mientras corría para abrir la puerta del auto para Lily antes de conducir hacia la costa.

Media hora después.

Justin gastó unos cientos de miles de dólares y compró un velero del Ejército del Nuevo Mundo a los pescadores.

Luego preparó muchas cosas, incluida una variedad de alimentos y elementos esenciales, llenando la mitad de la cabina.

Tenía que prepararlo todo a la perfección ya que salía con su diosa que no debía sufrir ni un poco.

Una vez que todo estaba listo, Justin izó las velas y partieron. El velero navegó lentamente en el mar.

Lily se paró en la proa mientras miraba el mar frente a ella. Se sentía emocionada y esperanzada.

‘Esposito, voy a buscarte. Lilybud viene por ti. Le ruego a Dios que tenga un viaje seguro y que nos encontremos pronto. También le pi