Los discípulos hablaban en voz alta mientras Darryl y Oliva escuchaban todo desde lejos.
Darryl se rio en silencio. 'Estos discípulos son realmente otra cosa. Siempre están pensando en sabotear a sus compañeros. Oliva es tan bonita y de buen corazón. Solo tiene un único defecto, que es la marca de nacimiento en su rostro, pero siempre la han tratado como a un monstruo y la han acosado. Qué imbéciles’.
Mientras Darryl murmuraba para sí, Oliva miraba al grupo de gente desde lejos mientras su cuerpo se estremecía de pánico. 'Sienna y Diego son cercanos. Seguramente vendrá por mí por lo que pasó ayer'.
Entonces, agarró la mano de Darryl y le dijo suavemente: "Dart, ¡vámonos!".
A ella no le preocupaba que la acosaran, pues era algo a lo que se había acostumbrado desde joven. Le preocupaba que fueran a por Dart. Después de todo, sus heridas acababan de mejorar.
Darryl estaba a punto de irse con Oliva. En el pasado, no habría entrado en pánico, pero las cosas no eran iguales. Sus heridas