«Nadie la ayudó»
Fedora siente su cuerpo tensarse, respira profundo antes de hablarle para calmarlo y con suaves palabras le responde.
—No me hizo nada, sólo no nos llevamos bien…
“Fedora, amor, no me mientas. Mira, no voy a presionarte para que me cuentes, sólo te pido que tengas presente que yo