La mirada llena de desconcierto entre el hombre frente Elie y ella, podía decirse que era completamente extraña
Mientras este no podía alejar la mirada de aquella, ella hacía lo mismo, sus ojos estaban enfocados en el hombre frente a ella, aquel que parecía estar ensimismado al igual que ella en su apariencia
Ellos dos de verdad qué se parecían, eran lo que se podía decir dos gotas de aguas, Elie se conocía lo suficiente, sus facciones rubias y delineadas, sus ojos verdes celestes y muchas cosas más, que podía jurar que este hombre tenía
Eran tan parecidos, sin duda aquello de que tenían un doble en alguna parte del mundo era posible, Elie pudo percatarse en el hecho de que su doble era un hombre
Pero antes de que ella pudiese decir una palabra para cortar la tensión que había en el lugar, la voz de Amelia, aquella que había olvidado por completo que estaba en el lugar logro sacarlos de su burbuja de evaluación
—También buscas algo de mi hermano, no hay duda que no eres más que una…
—