Las palabras de Wesley fueron como balas de cañón, golpeando la cabeza de Catherine una tras otra.

Sí.

Shaun había hecho algo ilegal. Ella nunca consintió nada de eso.

Las personas deberían ser condenadas si rompían la ley, ¿verdad?

¿Por qué estaba dudando?

Incluso si Shaun iba a la cárcel y la Corporación Hill caía, no tenía nada que ver con ella.

“Cathy, entiendo que es difícil para ti mencionarle esas cosas a la policía, pero también es difícil para mí”, dijo Wesley con amargura, “pero podemos afrontarlo juntos en el futuro. Yo, Wesley Lyons, nunca te abandonaré”.

Cuanto más hablaba, más culpable se sentía Catherine.

Cuanto mejor la trataba Wesley, más pesada era la piedra en su corazón.

…

Cinco horas después.

El helicóptero aterrizó en el césped de la residencia Yule. Tanto Joel como Lucas llevaban mucho tiempo esperando allí.

Lucas, que no había podido contactar a Catherine durante tanto tiempo, corrió y saltó inmediatamente a los brazos de Catherine.

“Mami…”. Lucas a