El trueno resonó.

¿Sarah solo había estado fingiendo con el Presidente Yard en ese entonces?

¿Las duras palabras que ella había dicho eran para que él rompiera con ella?

¿Ella lo hizo para que él pudiera arreglar su relación con sus padres?

Rodney sintió que su cerebro se abrumaba.

Casi lo creyó.

El corazón de Rodney volvió a calmarse en un instante cuando pensó en las veces que Sarah hizo que Shaun perdiera la memoria y la ambigua relación que ella tenía con Wesley.

“Suficiente, Rory. No sé lo que te dijo, pero no lo creeré”, dijo Rodney con odio, “fui testigo de que tan importante es el poder, el dinero y los beneficios para esta mujer”.

“Te juro que no te estoy mintiendo”.

Rory maldijo. “Si no me crees, puedes preguntarle al Presidente Yard. Una vez me encontré con el Presidente Yard en un banquete de negocios. Él dijo que Sarah había tratado a su madre y la curó. Le debía un favor a Sarah, así que accedió a actuar con ella. Para ser honesto, si ella fuera ese tipo de mujer