Capítulo 50. Sagaces reflexiones.
Al día siguiente, Elijah acudió al llamado de Zoé y se encontró con ella en la fundación, sosteniendo al bebé en sus brazos. Zoé, harta de la situación que los aquejaba, le dijo con firmeza:
—He tomado una decisión. Estoy decidida a dejarlo todo, incluso si eso significa renunciar a la fortuna de mi marido.
Elijah, envuelto en una cortina de esperanzas, sintió una oleada de emoción y le respondió:
—Zoé, si eso es lo que realmente quieres, estoy aquí para apoyarte. Juntos podemos enfrentar cualquier reto que se nos presente.
Zoé lo miró a los ojos y sintió el consuelo que necesitaba en ese momento.
—Gracias, Elijah. Tu apoyo significa más de lo que imaginas. Estoy lista para luchar por lo que realmente quiero.
—Con mi amor y mis firmes esfuerzos saldremos adelante. No seré rico, pero soy joven y puedo trabajar en lo que sea. Te juro que a mi lado nada les faltará, ni a ti ni a mi hijo.
—Elijah, tu determinación me inspira —respondió Zoé, con una sonrisa que iluminaba su rostro. —No nec