Parte 4...
Ella rió de manera burlona y balanceó el cuerpo.
— Uhh... Me estoy casando con un hombre poderoso.
Él también se rió. Dominique era despreocupada. Le había gustado su sentido del humor hasta ahora. La azafata regresó con el carrito y les entregó los platos.
— Voy a querer el postre de chocolate - ella dijo.
— ¿Te gusta el chocolate? - él pasó el platillo.
— No... lo amo - ella abrió más los ojos — Te daré un consejo - él dejó de revolver su copa — Siempre puedes comprarme con chocolates.
— Ah, claro - inclinó la cabeza hacia atrás — Pensé que las flores serían lo ideal.
— Siempre flores - ella hizo un gesto con la mano — Pero el chocolate es el punto que cierra el trato.
Ambos rieron y continuaron comiendo.
— En cuanto a mis... novias... No te molestarán.
Ella sonrió y se llevó la mano a la frente, fingiendo dolor.
— Ay... Dios mío, él es tan inocente - suspiró falsamente.
— ¿Por qué inocente?
— En serio, Nicolás - se inclinó hacia adelante — Si soy tu amante y de repente a