20.

Harvey no dijo nada al respecto, solo vio a Kate llorar con cierta incomodidad en el pecho. — Llévenlas a su casa, ya deben estar cansadas.

— ¿Eh? ¿El hada no viene con nosotras? — Hariadne se fijó en que Harvey se quedaba atrás mientras ellas avanzaban hacia el auto. — No... No quiero, yo quiero ir con el hada- Mamá, mamá el hada- mami...

— El hada no vendrá a jugar esta vez, hija...

— Pero mami, quiero ir con el hada- por favor — Intentó soltarse del agarre de su mano, lloriqueando — ¡Quiero ir, mamá!

— No, no puedes jugar con el hada. — Kate intentaba llevar las riendas de la conversación, pero apenas y podía mantenerse en pie mientras que su hija enérgica forcejeaba, negándose a rendirse.

— Pero mam-

— ¡Que no puedes quedarte, Hariadne nos vamos a casa ahora! — Kate vio con terror la expresión de susto en la carita de su hija en el momento en que le alzó la voz, cosa que nunca había hecho. — Ha-Hari... Mamá no quiso gritarte, lo siento.

Ella tembló, Kate sabía que Hari se e
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App