'Te quiero—'.

Esas dos palabras vibraron en los oídos de Ruby.

Las pestañas gruesas y largas de la mujer temblaban como si fuera una mariposa extendiendo sus alas.

Ruby no fue la única que se había detenido. Thompson, que estaba a su lado, también quedó aturdido en silencio.

¿Qué dijo Blaine? ¿Dijo que quería a Ruby?

¡Sólo Blaine se atrevería a decir algo así!

Thompson quería darle a Blaine un pulgar hacia arriba! ¡Buen trabajo!

Los ojos oscurecidos de Blaine miraban la cara justa y bonita de la mujer, como un halcón. "¿Por qué? ¿No estás dispuesta?".

Ruby inhaló profundamente. Ella lo miró directamente. "¿Se toma en serio, líder Frost Blade? No valgo tanto como esos recursos".

El hombre la miró a los ojos mientras lo pensaba. "Estoy bromeando".

Ruby se relajó.

Las esquinas de la boca de Thompson temblaron.

A medida que la escena se volvió extremadamente embarazosa, Thompson trató de aligerar el estado de ánimo. "No tenía idea de que el líder Frost Blade cuenta chistes tan