Stephen sonríe cuando comienza a recibir besos por todo el rostro, siendo su omega el culpable de todo esto
—Aurelie ¿por qué tan cariñoso? —pregunta el alfa con una sonrisa en su rostro, y masajeando la cintura del castaño con las palmas de su mano
—¿acaso no puedo ser cariño con mi alfa? —responde Parker colocándose encima del regazo de su alfa, sentándose y deteniendo sus besos
—Claro que si puedes amor... solo que tú eres más de decirme alfa de cuarta o cosas así —dice el pelinegro ahora acariciando los muslos de su omega
—No seas masoquista —Aurel entre risas traza el rostro de su alfa con su dedo índice— No quiero seguir insultándote, prefiero decirte alfa de primera
Stephen ríe ante lo dicho por su omega, y niega
—¿de primera? Ahora pasé del cuarto al primero