Aún sin entender, el alcalde volvió a preguntarle.

"¿En la casa del bosque?"

"Sí, aunque entré anoche, me gustó. Si no tiene dueño, es propiedad de la ciudad, ¿no?"

"Sí, esa casa es propiedad del ayuntamiento, pero nadie va allí, casi nadie llega, el camino por el bosque es muy difícil"

"Desde que nací, nunca ha habido nadie lo suficientemente valiente como para entrar allí, pero como lo hiciste, pasaste la noche y estás vivo y hasta salvaste al alcalde de la ciudad. ¿Será tuya la casa como regalo, para cualquier otra cosa? ¿desear?"

"Si no es mucho pedir, ¿podrías recomendarme a algunas personas que necesitan una costurera?"

Carlos accedió a los pedidos de Amora, pensó que le pediría dinero, pero ella quería vivir en un lugar donde ni siquiera los hombres de la ciudad tuvieran el valor de entrar.

Mucha gente tenía miedo de entrar en el bosque, ya que la caza estaba prohibida por ley.

Había muchos animales peligrosos en el bosque.

Y nunca nadie vivo al menos llegó a la casa abandonada, era una leyenda.

Carlos no creería que alguien estuviera tan loco como para vivir allí.

Pero era un pedido, no quería decepcionar a la persona que le salvó la vida.

Apenas terminaron de hablar llegaron varios guardias de seguridad, Carlos se había escapado para pasar tiempo solo con su nieto, y fue casi fatal.

"Señorita que me salvó la vida, cuyo nombre no sé, vaya mañana al ayuntamiento a firmar los papeles".

"Mi nombre es Amora Reios, recupérate y gracias señor".

Amora se fue, su nieto miró a su abuelo y le dijo "me gusta, el abuelo estaba enfermo y ella vino corriendo"

"Transfiere la propiedad de la casa abandonada en el bosque a su nombre e investiga todo al respecto"

Carlos estaba muy agradecido por ella, pero aún resultaba intrigante por qué pidió vivir en la casa abandonada.

Carlos no tardó mucho en tener la información de Amora.

Ahora entendía por qué quería vivir lejos. "Ella debe querer vivir aislada, para poder superar el dolor".

"Pobrecita, sufrió mucho, que heridas tan terribles le dejó este hombre, ahora entiendo por qué no le tiene miedo al bosque, su ex marido es mucho más peligroso para ella.

Cuanto más miraba la información de Amora, mis ojos se llenaban de lágrimas.

"Ella era fuerte"

Carlos miró a su nieto frente a él, su hija había sido víctima de una relación así, pero cuando se enteró ya era demasiado tarde.

El único recuerdo vivo era el de su nieto.

El alcalde fue claro y marcó al exmarido de Amora como un visitante no deseado.

Lo que significaba que nunca podría entrar a la ciudad, si lo hiciera sería ilegal.

Pero no podía caminar más de 2 metros porque las cámaras lo sabrían.

Amora fue al supermercado por primera vez en 2 años, estaba feliz y triste al mismo tiempo.

Ni siquiera podía comprar sus propias cosas.

Mientras regresaba, Amora miró el camino a su alrededor y estaba de buen humor.

Tan pronto como regresó, preparó y comió algunos sándwiches y comenzó a limpiar el resto de la casa.

Amora decidió limpiar todo el primer piso, no quería despertarse y se encontró cara a cara con una serpiente.

Mientras ella limpiaba y sacaba los muebles.

Tan pronto como terminó de sacar todos los muebles, ya era de noche, pero ya había hecho una gran diferencia en la limpieza.

William nunca había estado tan enojado como en ese momento, el dulce olor llegó con varios ruidos.

No tenía fuerzas para irse.

Y ni una sola cosa para tapar el sonido del ruido.

Tan pronto como cayó la noche, William no sabía qué hacer, tenía hambre, estaba débil y le dolía el oído.

Tan pronto como amaneció, Amora fue a bañarse al río.

Tuvo que ir al ayuntamiento para arreglar el alquiler.

Amora vestía pantalón blanco con blusa azul y el cabello suelto.

Tomó sus documentos y continuó su camino.

Amora miró hacia el bosque, pudo calmar sus pensamientos en ese lugar.

Por increíble que parezca, no sintió miedo ni ansiedad en el bosque.

Parecía que ese era su lugar del que nunca había salido.

Tan pronto como llegó al ayuntamiento, recibió asistencia rápidamente.

Tan pronto como llegó a la habitación había un hombre mirándola con una sonrisa.

Firme aquí señorita, Amora leyó inmediatamente el documento para darse cuenta de que no se trataba de un contrato de alquiler sino de la transferencia de la casa a su nombre.

"Hay algo que está mal, me toca a mí pagar el alquiler de la casa, no traspasarmela"

"No pasa nada, salvaste a nuestro alcalde, la ciudad nunca aceptaría tu solicitud de alquiler, especialmente una casa a la que todos temen, la ciudad está en deuda contigo en todos los sentidos".

Amora quedó atónita por todo esto, pensó que era demasiado.

Pero recordó que pronto podría tener una vida normal.

Amora tuvo muchos deseos reprimidos durante esos años.

Recordando que ella no tenía nada propio y todo era de su marido.

Sintió una tristeza intensa.

Recordar que estaba privada incluso de ganar dinero y tener que depender de otra persona para comprar incluso sus necesidades básicas la enojó.

Había sido tan incapaz siquiera de defenderse "¿Amor o Miedo?"

Se preguntó por qué no había podido deshacerse de Timoty.

Si se hubiera ido antes, tal vez podría haber tenido a su hijo a su lado o incluso a su Felicidad a su lado.

Ella no se permitiría rebajarse para estar al lado de alguien que la golpeó y luego se arrepintió y le regaló flores.

Pero en las horas siguientes empezó a tornarse violento.

Sabía que estaba en una relación tóxica desde que quedó embarazada, pero lamentablemente solo tuvo la oportunidad de salir cuando su angelito ya no estaba.