Todos sabemos que el proceso de duelo se divide por varias etapas, algunos dicen que la peor es la primera, cuando te ves obligado a decirle adiós aquello que tanto atesoras, otros dicen que es cuando acepas que no volverás a eso que te hacia sentir viva, cuando tienes que darte cuenta que todo termino y estar obligado a seguir tu curso. Para mi la peor parte era hacerme a la idea de que estaba sola, y no refiriéndome al hecho de estar soltera sino que desde que todo había iniciado nunca me había mantenido separada de él, todo el tiempo lo miraba deambular en mi departamento, en mi mente en todo. Estar sola se estaba convirtiendo en una horrorosa tortura, por que todo, el decirle adiós, el saber que no tendría solución me estaban destrozando, pasarme todo el tiempo solo sentada a la orilla de la cama observando como mi lagrimas parecían nunca terminar, mirando la alfombra del suelo divagando en recuerdos de mi memoria que siempre terminaban con un rostro. Me estaba volviendo tan loca