Capítulo 141
Contemplé el pañuelo que me ofrecía y vacilé antes de tomarlo con un suave "Gracias". Mi corazón se aceleró al recordar que aún guardaba otro pañuelo suyo.

Después de secarme las lágrimas y recuperar algo de compostura, sostuve el pañuelo con torpeza:

—Eh... cuando lo lave...

—No es necesario —me cortó Lucas, tendiendo la mano para recuperarlo.

Con las mejillas encendidas, bajé la vista y me concentré en terminar mi plato.

Al acabar, hice señas al camarero para pedir la cuenta, pero este me informó:

—Señorita Navarro, ya está todo cubierto.

—¿Ya pagaron? —pregunté extrañada—. ¿Quién fue?

Antes de que el mesero respondiera, Mariana exclamó alegre:

—¡Lucas ya se encargó, vámonos!

Me levanté tras ellos, mortificada:

—Señor Montero, se suponía que yo invitaba para agradecerle su ayuda del otro día. ¿Por qué se adelantó a pagar?

—Ay, por favor, es solo una comida —interrumpió Mariana—. ¿Por qué te complicas? Lucas tiene dinero de sobra, para quien le gus...

—¡Ejem! —Lucas tosió repentinamen
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App