"Bien, iré a buscar un lugar para ella".

"Mmm". Avery pensó durante un rato. "Ella es una mujer que vivirá sola. Búscale un barrio seguro".

"Si le encuentro un buen lugar, ¿lo tomará por sentado?".

"Si te preocupa esto, puedes alquilarle una casa primero y tú pagas el alquiler", sugirió Avery. "Si estás satisfecho con ella, entonces puedes comprarle una".

La mirada de Elliot era fría. "Aparte de ti y de los niños, no quiero pagar por la vida de otra persona".

"Lo sé, pero es tu hermana. Además, Nathan no es tan malvado como creemos. Si no se hubiera entregado...". Avery no pudo continuar su frase.

"¡Ve a ducharte! Te enseñaré el lugar en cuanto lo elija". Elliot no quería seguir con el tema.

"Está bien".

…

Al día siguiente, Avery se dirigió a casa de Ben a primera hora de la mañana.

La puerta de la casa de Ben estaba bien cerrada. Parecía que aún no se habían levantado.

Avery sacó su teléfono y marcó a Ben. En ese momento, se escuchó los pasos de alguien que venía desde atrá