Mi padre me invitó a conocer su nuevo socio, el consideraba que si yo me encargase de la empresa necesitaba estar al día con todos sus negocios y que mejor que conocer cara a cara a todos sus socios.

Nos dirigimos a un restaurante muy lujoso y que además me encantaba, pero aun así me encontraba molesta puesto que llegamos primero que el socio y la verdad no quería esperar por mucho tiempo a un viejo irresponsable.

Para mi sorpresa nada de lo que pensaba era correcto. El socio llegó incluso antes de la hora acordada y su físico me hizo recordar que mi padre y yo fuimos quienes llegamos demasiado antes de lo acordado.

Joder era el chico más apuesto que mis ojos habían visto. Mi padre se paró y nos presentó y yo estaba realmente hipnotizada con su hermosa sonrisa. Él me estaba tratando con tanta amabilidad que hizo que me enamoraba de inmediato. Tuve el mejor almuerzo con el chico m