Capítulo 34 “El médico del pueblo”

Erik Johansson

Caminó a mi escritorio después de oír aquella breve charla a medio mimo y medias palabras, seguro de que muy cierto es el refrán que reza: “El buen entendedor, no necesita mucha conversación”. Estás mujeres con sus boquitas hermosas y sus ropas caras me están viviendo ambas y quien sabe quién más… Empiezo a creer que todo lo que me dijo Jade es cierto, aquí tengo más interesados que empleados. Antes Lanzo la puerta para que sepan que estoy caliente y furioso.

—Erik ¿puedo entrar? —me dice Lena desde la puerta, su voz muy bajita y chillona, como niña.

—¡COÑO! ¡Te llamé yo, tienes que entrar!

Entra y está nerviosa. Le arrojó los estados de cuenta de mi tarjeta dorada de gastos representativos en la corporativa, ella los toma del piso.

—Yo quiero que tú me expliques ¿Qué coño es esta vaina?

—Erik, no sé de qué me hablas —No me aguante el que me viera la cara de pendejo y como un guepardo salté a su lado y cerní su cuello.

—¿En qué coño