Aiden Baker
Estaba nervioso. Simplemente nervioso. Estaba al lado de mi padre en la parrilla de acero inoxidable que le habíamos regalado en la navidad pasada. Desde aquí podía ver a Charlotte sentada platicando animadamente con Lizzy, mi hermana, mi madre y Andrew. Ava correteaba con el papalote que le había traído Lizzy. Se veía feliz corriendo por todo el jardín.
—¿A qué horas vamos a anunciar tu compromiso? Quiero ver la cara de tu madre y la de tu hermana cuando escuchen y vean el anillo de compromiso de mi madre en el dedo anular de Charlotte.
Podía ver la sonrisa de mi padre expandiéndose poco a poco por todo su rostro.
—Gracias.
—¿Por qué?
—Por el anillo. Podía comprar uno, ¿lo sabes?
—Pero no uno con historia. Ese anillo ha pasado más de cinco generaciones, y esta no será la excepción. ¿Hablaste lo de la operación? Benjamín llega mañana y le envié el informe médico de ella