Lo bueno de tener a una amiga que estaba embarazada era saber lo que se siente estar en ese estado y darte cuenta que no deseas estarlo.
Lorena tragó en seco y dio un paso atrás. La pobre Sasha no había podido comer nada en todo el día, todo lo vomitaba, las náuseas la estaban volviendo loca.
La joven volteó a ver hacia atrás y vio a Cristian petrificado observando a Sasha vomitar en el baño de invitados.
—¿Aún no ha dicho de quién es? —preguntó el joven en un susurro.
Lorena negó con la cabeza y Cristian entornó su mirada mientras veía a Sasha, la joven ya estaba reincorporándose, bajó la cadena y comenzó a lavarse la boca y las manos.
—Hoy viene Adam —dijo Cristian a su esposa, pero subió un poco más el tono de su voz para que pudiera escuchar su amiga.
Sasha salió del ba