Capítulo 47

El auto se deslizaba silenciosamente por la carretera sinuosa que llevaba a la mansión. A través de la ventana, observé los viñedos bañados por la luz plateada de la luna, sombríos y casi melancólicos. El conductor mantenía los ojos fijos en el camino, discretamente ignorando la tensión palpable entre nosotros en el asiento trasero.

Christian estaba sentado con la cabeza recostada, los ojos cerrados, pero no dormía. El agotamiento físico y emocional era evidente en cada línea de su rostro. Cuando finalmente rompió el silencio, su voz salió ronca, baja:

"No necesitabas haber hecho eso."

Mantuve mis ojos en el paisaje que pasaba, como si los contornos oscuros de las vides pudieran ofrecer algún consuelo.

"No lo hice por ti", respondí, una amargura que no pude ocultar tiñendo mis palabras. "Lo hice por tu abuelo."

"Aun así", insistió, y por el rabillo del ojo, noté que había abierto los ojos para mirarme. "Gracias."

Sentí su mirada sobre mí, pero me rehusé a mirarlo. Temía que si lo hací
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP