CAPÍTULO 02

“¿Qué ?” pregunto, sorprendida.

“Me has oído. Estás despedida.”

“No, señor, no puedes hacer eso. Lo siento mucho, pero–”

“¡SAL DE AQUÍ AHORA !” grita.

Te lo había advertido.

Entro y recojo todas mis cosas. Cuando estoy a punto de irme, la veo, esa maldita, sonriendo. Eso me enoja aún más.

Salgo a la derecha.

¡Sí ! Lo eres.

Bien, entonces.

Ahora, puedes hacer lo que quieras. No te voy a detener.

Me dirijo hacia su mesa, tomo su cappuccino que está ahí y se lo lanzo a la cara.

Con una sonrisa en mi rostro, le digo : “¡Que tengas un buen día, señora !”

Con eso, salgo del café. La escucho gritar y al gerente disculpándose con ella. Camino hasta mi casa.

¡Dios mío ! ¿Qué voy a hacer ahora ? Estoy sin trabajo.

Cuando llego a casa, veo a Nounou sentada en el sofá, sosteniendo un papel en su mano. Me acerco a ella, me arrodillo frente a ella y tomo el papel de su mano.

“¿Qué es esto, Nounou ?”

Leo el documento. “¿Qué ?”

“Bella, quieren construir un hotel en esta propiedad. Mi hijo perdió esta última casa en el juego. ¿Qué vamos a hacer, Bella ?”

Su hijo es un borracho y un jugador, claro, siempre nos causa problemas. Nounou ha perdido todo lo que tenía por su culpa, y esta casa era lo último que le quedaba. Ahora también la va a perder. La abrazo.

“Te prometo que encontraremos una solución, Nounou. Encontraré un lugar para nosotras.”

Pero la pregunta es : ¿cómo ?

También he perdido mi trabajo.

Tenemos solo una semana para salir de esta casa.

No puedo verla llorar. Tengo que hacer algo.

**BELLA ADAMS**

Ahora solo me queda una esperanza. Puedo pedirle a Steve que me ayude a encontrar trabajo. Sí, él es el único que puede ayudarme. Te estarás preguntando quién es Steve. Steve es el único amigo que tengo.

“Nounou, estaré de vuelta pronto.” Le doy un beso en las mejillas.

“¿Dónde vas ?” pregunta.

“Voy a ver a Steve. Tal vez él pueda ayudarme a encontrar un trabajo.”

“¿Por qué él ? ¿No puedes hacerlo sola ?”

“Nounou…” Salgo de la casa.

A Nounou no le gusta nada Steve. Siempre dice que es un tipo malo. Pero yo siempre le digo lo contrario.

Cuando llego a la casa de Steve, sueno el timbre. Él abre la puerta.

“¿Bella ? ¿Qué haces aquí ?” pregunta.

“Eh… Steve, tengo que hablar contigo sobre algo,” digo.

“Está bien… pasa.”

Me siento en el sofá, él se sienta frente a mí.

“Entonces, ¿sobre qué querías hablar ?”

“Pues, Steve, mira… realmente necesito un trabajo.”

“¿Un trabajo ? Pero ya tenías uno, ¿no ?”

Entonces, le cuento toda la historia. Él piensa por un momento y luego sonríe.

¿Por qué este tipo sonríe ?

Bella, no me siento bien. Creo que deberías irte.

¡No ! ¿Cómo podría irme ? Necesito un trabajo, ¡ya ! No puedo simplemente irme.

Steve se levanta de su asiento y viene a sentarse junto a mí, muy cerca. Retrocedo un poco. Él pone una mano sobre mi muslo y empieza a enrollar un mechón de mi cabello con su otra mano.

“Mira, Bella, la cosa es que tengo un trabajo para ti. Es perfecto.”

“¿Pero ?” pregunto.

Él sonríe de nuevo y dice : “Pero sabes que en este mundo, nada es fácil. Todo tiene un precio.”

“¿Qué precio ? ¿De qué hablas, Steve ?”

Se acerca aún más y sostiene mi rostro con sus manos.

“Te he querido desde hace mucho, Bella. Desde el primer día que te vi, quise tenerte. Pero al hablar contigo, entendí que no eres una chica que se consigue tan fácilmente. Entonces, vi tu punto débil. Nunca has tenido un amigo. Pensé, ¿por qué no ser tu amigo y tenerte así ? Bella, te prometo que no lo lamentarás. De hecho, te va a encantar. Haré que tu primera vez sea especial. Después, conseguirás fácilmente el trabajo, Bella. Solo una noche conmigo.”

Mis ojos se abren como platos. “¿Qué ? ¿Estás loco ? Steve, nunca te he visto de esa forma.” Me levanto del sofá. Él también.

“Pero yo sí. Me vuelves loco, Bella. Es solo una noche.”

“Aléjate de mí.” Él sigue acercándose y yo retrocedo hasta que mi espalda golpea la pared. “Por favor, aléjate de mí, Steve.” Comienzo a llorar.

“Vamos, Bella.”

“¡ALÉJATE !” grito.

Estoy a punto de escapar cuando él agarra mi mano y me tira hacia él de nuevo. Mi espalda golpea la pared dura.

“Por favor, déjame ir, Steve.” Le suplico.

Pero él no me escucha. Está a punto de besarme, así que elijo la única opción que me queda y le golpeo donde más le duele.

Él gime de dolor, abro la puerta y salgo corriendo. Lo escucho gritar detrás de mí. Sigo corriendo, una y otra vez.

¿Por qué todo pasa al mismo tiempo ?

Primero pierdo mi trabajo.

Luego esta carta.

Y ahora Steve.

Era el único amigo que tenía, y ahora también…

Todo el mundo en este mundo está podrido.

Aquí estoy, sentada en un bar, bebiendo vaso tras vaso.

Creo que ya estoy borracha.

“¿Qué debo hacer ? Ya no puedo pensar. ¿Por qué mi vida está tan jodida ?”