Unos días después, Gregorio esperaba con ansias a su amiga Dayana a la afueras de la compañía, habían pasado varios días, así que él esperaba que ella le tuviera noticias.
Al verla salir, se va detrás de ella hasta llegar a la cafetería donde siempre almorzaba.
_¿Dayana?.
_¡Gregorio! Me asustaste_ Le responde ella agitada.
_¿Me pudiste averiguar algo?.
_Si, Freddy me dio una copia de los registros, desde ayer la tengo, pero no sabía donde localizarte.
_Esta bien no te preocupes, esto es grandioso ¿Dónde está?.
_Toma_ Le dice ella sacando los documentos de su bolso.
_Él los recibe y empieza a leer muy serio.
_¿Qué dicen?_ Pregunta ella con curiosidad.
_Que raro, la transferencia por la que me acusan, aparece que fue hecha desde mi propia computadora, ¡Eso es imposible! Alguien tuvo que haberla hecho ¿Pero quién?.
_¿Y ahora que vamos hacer?_ Le Pregunta ella intrigada.
Gregorio sigue mirando pero no ve nada extraño, la única trasferencia que hubo fue esa, él estaba muy confundido ¿Quién