49. Una estafadora
Patrick no paraba de sonreír y mirar una y otra vez a Alexa, no solo lo había cambiado por completo como hombre sino que ahora además lo haría padre y bastaba con ver cómo era con Daniel para saber que sería una excelente madre.
— Solo quiero decirles antes de dar la noche por terminada que por ahora guardemos para nosotros la noticia del bebé.
— ¿Por qué?, yo quiero alardear de mi sobrino, no es justo.
— Es solo por unos días, aún no hemos ido al médico a confirmarlo y quizá en el trabajo se pongan un poco pesados.
La verdad era que tenía miedo, "quien sabe ¿cómo reaccionara esa bruja?, ¿Y si quiere hacerle daño a mi bebé?, estoy sobre la cuerda floja"
Una vez todos se fueron y se encontraban solos en la habitación Alexa preguntó, — Creo que no sales del asombro, ¿Verdad?
— Ha sido una total sorpresa pero muy grata, quiero vivir cada una de las etapas contigo, disfrutar de verlo crecer en tu interior y hablarle cada noche.
— Qué dulce.
— Una motivación más para intentar volver a cami