Mundo de ficçãoIniciar sessão
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50. Klaus explota
Me siento realmente mal, quiero de verdad confiar en James. Tengo demasiados sentimientos encontrados. Mi mente se está imaginando todo lo que puede estar haciendo ahora.Ha pasado una hora desde que ha salido. No ha regresado, un vacío inmenso se está instalando en mi pecho.— ¿Qué estás haciendo, James?Me quedo despierta hasta las cinco, que es la hora en la James llega. Planeaba hacerme la dormida, ver si el deseaba contarme lo que pasa, pero, no puedo con esto. Mi pecho se siente oprimido, no quiero estar así un segundo más.— ¿Qué haces despierta, Claire? —James se sorprende cuando entra a la habitación— Lo mismo podría preguntarte, Jamie —enciendo la luz— ¿Qué haces despierto?— Surgió algo en el trabajo, tuve que salir.Quizá en otro momento, le hubiese creído ciegamente. Pero ahora, no creo ni una sola palabra.— ¿Surgió algo? —asiento— ¿Por eso te fuiste en pijama? ¿Tenías que irte rápido?— Esto suena ridículo, Claire, pero en serio no puede darte mas explicaciones, no tod
51. Accidentes que pasan
Punto de vista “Claire”Justo cuando estaciono en el trabajo, mi celular comienza a sonar. Me sorprendo de ver que es Rebeca, no bajo del auto para poder responder su llamada.— Hola —respondo— ¿Qué sucede? Tan rápido me extrañas.— No te asustes —es lo primero que dice, lo que hace que me alarme— ¿No has hablado con James?— No, ¿qué pasa?— Me acaban de llamar de la escuela, Claire. Para preguntar por qué motivo Klaus no pudo asistir.— ¿Qué? ¿Cómo? —mi mente comienza a pensar a mil por hora— Enseguida te devuelvo la llamada, Rebeca.Cuando cuelgo la llamada, comienzo a llamar a James. Mis nervios aumentan con cada llamada que hago y que el no me responde. Hasta la quinta llamada, me toma el celular.— ¿Están bien? —pregunto, antes que nada.— Perdóname, Claire —la voz de Jamie, suena triste, mal— Perdóname, Claire.— ¿Dónde está, Klaus?— Perdóname —repite.— James —mi tono cambia, esto es serio— ¿Dónde está mi hijo, James?— Estamos en el hospital, Claire. De verdad te pido mil pe
52. Una madre también pierde el control
Flashback de ClaireMi cabeza duele, no sé como hacer para comprar la leche de mi propio hijo. Reducí todos los costos a lo máximo posible, estoy levantándome mas temprano para irme caminando a mi trabajo, Rebeca no me está cobrando por ayudarme con Klaus, tuvimos que dejar la terapia de socialización porque no puedo pagarla. ¿Qué mas tengo que hacer?Siento que voy a explotar. El trabajo me tiene estresada, mi casa me tiene estresada. ¿en qué momento pensé que yo podía sola con esta carga.— Nicklaus —hablo a mi hijo, que intenta agarrar algo de la barra de la cocina— Nicklaus —vuelvo a llamar, pero continúa ignorándome.Lo dejo de ver y vuelvo mi vista a las cuentas que tengo sobre la mesa. ¿De donde voy a sacar dinero para la puta leche de mi hijo?Miro la lata que se encuentra casi vacía, miro mi despensa donde no hay nada, miro a Nicklaus de nuevo, que sigue intentando alcanzar algo sobre la barra.— Klaus, te he dicho que la cocina es de mami, no tienes nada que hacer tú allí —l
53. Decisiones desesperadas
Tres días han pasado desde el accidente de mi hijo, me encuentro demasiado estresada por todo lo que debo pensar. EL trabajo está a nada de terminarse, estoy con los últimos detalles, Klaus está mal, en serio mal, parece que todo lo estresa en estos momentos, no he podido averiguar que es lo que le causa problemas. Por otro lado, James actúa raro, sale por las madrugadas y debo fingir que no lo sé, para ver si el me llega a decir la verdad.— ¿Puedes explicarme todo?Maya ha venido hoy a acompañar a su madre, de paso se vino para visitarme un rato.— Klaus está mal, creo que necesita un respiro. Creo que pensé que estaba ya bien, que no le seguí poniendo la atención realmente necesaria. Creo que ha sido mi culpa, Maya.— No puedes culparte por todo lo que pase, ahora ya está su padre también, que la culpa no recaiga solo en ti. Pero, te conozco, Claire, eso no es todo lo que pasa, te ves demasiado enferma, me está comenzando a preocupar.— Es que… James se queda a dormir con nosotros
54. Peligro en carretera
Luces apagadas, ni un solo ruido. El corazón de James latiendo con mucha fuerza era lo único que se escuchaba en esa casa, James estaba evitando pensar lo que era ya bastante obvio.— ¡Nicklaus! —grito desesperado, subiendo por las escaleras— ¡Claire!Lo primero que hizo en el segundo piso fue revisar la habitación de su hijo, la cual no tenía las pertenencias más importantes de él. Con miedo y confusión, revisó la habitación de Claire, que al igual que la habitación pasada, estaba casi completamente vacía.Tomó de nuevo su celular y llamó a Claire.— Responde, responde —repitió demasiadas veces— ¡Responde, maldita sea!En un intento desesperado, su celular fue lanzado en el aire, pegando fuertemente con una pared. James se llevó las manos a la cabeza, sin entender nada de lo que estaba pasando. ¿A caso la presioné para casarnos y por eso se fue? ¿Había cometido algún error?James creía no haber hecho nada mal, así que no entendió absolutamente nada. Con una idea en mente, fue por su
55. Los reyes se han reunido
— ¿Qué estás diciendo? ¿Cómo es posible? —preguntó demasiado confuso James— Tenemos evidencia de que hoy se reunió con la señorita Katerina, señor Walton —me respondió el detective— Tenemos evidencia de que ambos han estado trabajando juntos, desde hace un tiempo al menos.— ¿Katerina y Aldo?— Si, señor Walton. Además de que hemos visto al señor Aldo conducir por la carretera estatal, en dirección a la casa de la señorita Claire. Creemos que puede ser que trame algo, no sabemos si bueno o malo.— Es Aldo —responde James como explicación— Aldo jamás dejará que yo sea feliz con Claire, es algo que no permitiría.— También lo hemos visto merodeando otros lugares, como ferreterías, la casa de la señorita Katerina, la empresa, su casa personal, siguiendo a Nicklaus. Todo parece estar conectado, el accidente que tuvo, todo.— Te veo en un rato —dice James colgando la llamada— Cancélalo, no la necesito ahora aquí.— ¿Cómo? ¿Ya no la amas? —Gregory lo dice en broma, pero James no tiene tiem
56. Planeando una pasarela
Me disculpo por irme de esta forma, pero elijo salvarme a mi antes de que salga herida. Soy profesional, ante todo, dejé todo el proyecto con lo necesario para que otra persona se encargue, muchas gracias por darme la oportunidad. Lo sé todo, sobre ti y tu ex novia. No necesitas darme explicaciones, pues no las quiero. Sigues y seguirás siendo el padre de Nicklaus, eso lo podemos hablar cuando lo veas necesario. ClaireTres meses después— ¿Puedes adelantar la reunión para dentro de dos horas? —preguntó Maya a Claire.— En un momento te confirmo —respondió Claire tomando su teléfono.Maya se levantó de su escritorio solo para poner su mano sobre el pequeño vientre abultado de Claire, Claire sonrió ante esa muestra de cariño.Mientras James ha batallado con mantener todo en orden y descubrir lo que Aldo planeó todo este tiempo, Claire ha estado trabajando para su mejor amiga, Maya, en París todo ha sido muy diferente.— Me dijo su secretaria que están ocupados antes, que sigue a la h
57. The Madson
— Mamá —dice Klaus sosteniendo mi mano— Extraño a papáSus palabras me rompen el corazón, por un momento una extraña pesadez se siente dentro de mí. Mi hijo ha estado esperando, creo que igual yo.— Pronto lo veremos. ¿Sí?— ¿Podemos verlo hoy?— Papá está trabajando mucho, pequeño. Como yo lo he estado haciendo, de verdad quiero que estemos los dos juntos hoy, quiero que veas a mami.— ¿Ya sabemos como se llamará? —dice tocando mi estomago— Pronto lo sabremos, amor. Ahora ve por los juguetes que prefieras llevar hoy, debemos apurarnos. ¿Sí?— Si mamá.Siento la mirada de Rebeca, estos tres meses no hemos sido las mejores amigas. Ella sigue en una posición a favor de Jamie, de verdad que me he sentido mal por eso.— ¿Nunca dejarás de mirarme de esa forma? —pregunto— Mi bebé saldrá con tu rostro, de seguir así.— No digo nada —finge ponerse un cierre imaginario— Todo te lo he dicho ya, de todas formas.— Gracias —digo sarcástica— Eres la mejor, Rebeca.— Eso lo sé, Claire.Comienzo a
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