Ver a Carlos fue una completa sorpresa para Clara, estaba tan emocionada que no sabía qué decir. —Carlos, ¿cómo es que estás aquí?

—Hermana Suárez, ha sido tan difícil encontrarte. Afortunadamente, el hermano Marín logró contactarme y así pude verte.

—Sí, han pasado tantas cosas en estos años —suspiró Clara, llena de nostalgia.

—Hermana, ¿cómo está tu enfermedad?

Clara se quitó la peluca y dijo: —Hace medio año estuve al borde de la muerte por el brote de la enfermedad. Afortunadamente, gracias a los medicamentos que me diste antes y a la quimioterapia, logré superarlo. Ahora los efectos secundarios de la quimioterapia son menores y mi cabello ha comenzado a crecer, pero el tumor aún está presente.

Al ver el cabello corto de Clara, incluso más corto que el de un hombre, Paloma sintió dolor en el corazón y dijo: —Clari, has sufrido mucho.

—Ya pasó, en aquel momento estuve al borde de la muerte, pero afortunadamente no llegué a ese punto. Carlos, he oído que has estado investigando sobre