—Oh, solo haz lo que digo. Estoy conduciendo ahora mismo. ¡Te contaré más más tarde! —dijo Zhou Xinmian.

Zhong Keke rápidamente detuvo el trabajo que tenía entre manos y les pidió a sus asistentes que se fueran a casa primero. Se había ido después de apagar la computadora y cerrar la puerta del estudio.

Sin embargo, cuando llegó a la entrada del edificio, vio a los guardias de seguridad bloqueando a un grupo de personas, estas personas tenían cámaras, algunos tenían cámaras de video, mientras que otros tenían micrófonos.

En medio de la cacofonía de voces, Zhong Keke se quedó estupefacta al instante cuando escuchó “Xinyue Studio” y su nombre. “¿Estas personas están aquí por mí?”.

Zhong Keke se dio la vuelta y salió corriendo del edificio por la entrada lateral. Sin embargo, escuchó a alguien gritar su nombre desde atrás antes de alejarse. Inmediatamente, un grupo de personas la rodeó.

—Eres la señorita Zhong Xinyue y tu nombre de nacimiento es Zhong Keke. Eres la cochera de Me