Shen Weifang dijo: "No, regresa primero. Alguien lo llevará de regreso a la casa de la familia Su cuando llegue el momento".

Después de la llamada, Shen Weifang miró a su hijo. "Pequeño Fei, no malinterpretes a Yi Qianjin si quieres estar con ella en el futuro. Cuando ella esté en problemas, no te quedes de brazos cruzados mirando".

"No me quedaré de brazos cruzados mirando. ¡Haré todo lo posible para ayudar a la Pequeña Jin si alguna vez tiene problemas!", dijo el pequeño con seriedad.

Shen Weifang sonrió. "¡Genial!".

Solo esperaba que su hijo recordara lo que dijo hoy sin importar lo que sucediera en el futuro.

...

Xia Xi no esperaba que Su Zhehan llegara borracho a su puerta.

"Su Zhehan, es tarde. ¡Me voy a la cama!", dijo Xia Xi con frialdad, tratando de cerrar la puerta.

Sin embargo, su mano estaba en la puerta, impidiéndole cerrarla.

"No... no cierres la puerta. Yo... yo solo... vine a verte... A mí... me gustaría hablar contigo. No... No te preocupes, no haré nada más,