Punto de vista de John.Estaba en el sofá de la sala de mi departamento. Esperando a Lola, una vampira con la que solía verme de vez en cuando, para alimentarme y tener sexo. La realidad era que aunque la sangre humana era mejor y daba más fuerza, también era más difícil de controlar la sed y más durante el sexo, que era el momento en que estaban mas vulnerables, y facilitaba poder encantarlas para que olvidaran que me alimenté de ellas. Pero si perdía el control podía dejarlas sin vida.En cambio con Lola o cualquier otra vampiro, no debía preocuparme, aunque la sangre de otros vampiros puede mantenerme vivo, si se puede decir así. No existe el riego de perder el control. Algo que me gustaba hacer al menos una vez al mes, era salir a cazar criminales, que estaban dispuestos a matar o abusar de otros. Reconozco que no lo hago más seguido para no levantar sospechas, era lo último que necesitaba ahora.Desde que conocí a Jess, nada es igual. No logró sacarla de mi cabeza, me esta cost
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