— ¿Yo? ¿hacerle algo?— cuestiona el hombre tenebroso, al mismo tiempo que sale de entrar a sombras presentándose como una gran mole de músculos frente a Bruce lleno de cicatrices, y marcas por todo su cuerpo, incluso uno de sus ojos estaba completamente blanco mostrando su ceguera parcial.— ¡Déjala! ¡déjala ir! ¿no sabes quién soy?— grita Bruce desesperado por hacer retroceder de alguna manera al agresor y mirar a Effie completa y bien con sus propios ojos.— ¿No me escuchaste niño estúpido?— grita él —por supuesto que sé quién eres, de hecho por eso mismo es que te encuentras aquí, ese era el propósito de todo esto, encerrarte como la bestia maldita que eres…— en ese momento Bruce comienza a jalonear los delgados troncos que hacían de él un ser enjaulado.— Soy un cazador experto, no podrás liberarte, ni aunque lo desees pequeño bastardo— el odio que desfilaba de la voz del hombre era tan inmenso que incluso erizaba la piel del joven muchacho.— ¿Dónde está ella? ¿Dónde está Effie?

En ese momento ella se detiene, mirando con asombro y desdén al alfa que tenía frente a ella.Declan se deja caer de rodillas al suelo, algo que él como Alfa jamás había hecho antes pero la desesperación que lo recorre por completo, la necesidad de hacerla comprender, de hacerla regresar, de pedirle perdón era más grande que su orgullo.— ¿Qué? ¿Ahora te rodillas? ¿Qué otra cosa vas a planear? ya no creo en tus palabras, ni en tus acciones, esta es solo una de las tantas cosas y humillaciones que me tragué por ti, para hacerte saber que mi amor era sincero… pero ahora eres poco menos que una burla, un Alfa sin poder, una derrota anunciada, eso es lo que eres y niego de forma absoluta la posibilidad de otra luna en esta manada, morirás absorbido por la soledad y el dolor, pensando en lo que pudo ser y que perdiste por tu egoísmo, ego y arrogancia…— No, no, no lo hagas, por favor, te lo ruego— dice Declan al mismo tipo que intenta levantarse del suelo pero solo observa como Beca se ar

Debajo de la cama de Bruce se encontraba soluna quien al sentir la tristeza y el coraje del joven se acerca para colocarse en sus piernas cruzadas acurrucado.— Soluna ¿verdad que yo tengo razón? ¿verdad que yo debería salir de aquí?— Pregunta el joven a la pequeña criatura mágica que se había vuelto su amigo— hay tanto por conocer, hay tanto que hacer incluso…— dice él con la mirada sombría y resignada— si quieren matarme habré conocido lugares interesantes antes…Bruce se sentía triste solo e incomprendido…Mientras tanto Beca estaba visitando a Effie en la clínica, los pequeños camastros con sábanas blancas le mostraban lo frágil que podía llegar a ser.— Dime ¿cómo progresó?— cuestiona ella a la curandera Rina, una mujer considerada la mejor en distintas técnicas de curación.— Hasta el momento no he conseguido sacar una sola palabra de sus labios— declara la mujer nerviosa y preocupada por la niña— sus heridas físicas sanan conforme se espera aunque hay ciertos rastros de que

—¡Abre, por favor! ¡Abre! ¡Despierta padre!Evan, en ese instante, abre la puerta que parece que va a atacar a cualquier cosa que se presente frente a él, la voz de su hijo estaba tan cargada de desesperación que esperaba ver a un ejército queriendo llevárselo.— ¿Qué sucede? —cuestiona al encontrarlo completamente solo.“¿qué clase de broma era todo esto? “ Pensó Evan aun confundido. — ¡Beca! ¿Dónde está Beca? —cuestiona Bruce asomando su rostro hacia adentro.Y en ese instante, Evan se da cuenta que Beca no está en la cama y la ventana está abierta.Él había dormido en la puerta para cuidar y proteger de cualquier ataque.Y aunque no quisiera aceptarlo el olor a lilas y caramelo lo tenían mareado, de tocarla, no sabía si podría detenerse. —¿Qué sucede?—¡Ella! ¡Papá! ¡Ella en las lunas llenas sufre… sufre demasiado! — Bruce se jala el cabello al recordar lo que había visto antes había sido espantoso— ¡No, no! ¡No puede repetirse! —dice Bruce, desesperado jalándose el cabello una

El tiempo pasa, transcurre, de forma demasiado lenta como para que Beca pueda tener suficiente confianza para declarar la verdad.— Te estoy dando la oportunidad de que dejes de guardar secretos, confiesa por favor, aprovecha…— declara Alfa Evan con un tono tan profundo que absorbe por completo cada gramo de atención de ella. Al mismo tiempo que de forma potente y constate emanaba una fortaleza inquebrantable. Da un paso, luego otro, se acerca hacia Beca provocando en ella una pequeña emoción que no sentía desde mucho tiempo antes, incluso achica sus ojos, sorprendida por su reacción tan natural.“ ¿ Qué sucedió anoche?” se cuestiona ella “ ¿Realmente podrá comprenderme? O ¿ aceptarme?”Traga saliva nerviosa con la sensación de no poder desviar su mirada de la de Alfa Evan.— Es solo que…- Se queda en silencio nerviosa con un agudo sentido de permanencia.“Si no lo digo, si no hablo tal vez el tiempo se congele y le permita olvidar” piensa Beca en medio de ideas cada vez más insens