Dante sonrió y la besó apasionadamente... Horas después Allegra dormía entre sus brazos. La miro y mientras lo hacía reflexiono sobre que su relación era casi perfecta. Allegra nunca le exigía nada y no parecía tener más ambición en la vida que hacerlo feliz. Y lo hacía de maravilla, tuvo que reconocer. No quería perderla, por eso había decidido que no se cuidarían más con preservativo, quería una declaración de monogamia de parte de Allegra. Él se sentía orgulloso de cómo la trataba. Cuidaba de ella y era una mujer feliz. ¿Por qué? Porque él mantenía alejada la dura realidad de la vida. Incluso conseguía que sus sueños se hicieran realidad. **************** Dos días después se dirigieron al aeropuerto despues del medio dia. El vuelo tardó tres horas en salir a causa de una tormenta, Dante se puso a trabajar en su ordenador portátil y ella hojeó varias revistas. El tenía un aspecto tan sofisticado... y ella era una mujer insignificante. — ¿ Quieres un cafe ?, le preguntó Alle