No podía controlar más mi deseo.Podríamos hablar sobre Jenny después, pero lo de ir al acantilado tendría que ser otro día. Me acerqué a Sylvester en la cama, me senté encima de él con las piernas abiertas y desabotoné mi blusa. "Tienes que terminar el cuento, cariño. El lobo quiere devorar a la Caperucita Roja, y a diferencia de ella, yo si estoy dispuesta a ser bien comida por mi lobo..." le dije, y él tocó suavemente mis tetas, llevándolas a su boca. Chupó mis pezones despacio, lamiéndolos en espiral.Estaban sensibles y duros, y gemí de placer. ¡Quería más!, algo en mí lo deseaba tanto, que lo necesitaba para satisfacer esa necesidad."Te voy a comer entonces hasta que me supliques que pare." gruñó, dándome la vuelta en la cama.Besó mi cuello, mordió mis orejas y chupó el lóbulo de ellas, soplando suavemente sobre este. Se me puso la piel de gallina, y mi cosita se contrajo de forma violenta."Oh ¡sii!, Sylvester, que rico, cariño" le rogué.Mi cuerpo lo deseaba, deseaba su piel

~Tamia~Stephanie no se veía bien. Sus ojos estaban hinchados, y sus manos temblaban. Era evidente que había estado llorando.Quise ignorarla, pero no pude. Así que decidí mostrar un poco de preocupación."¿Estás bien?" le pregunté, y ella me miró, negándolo."A decir la verdad, no lo estoy, Tamia. Estoy muy preocupada por Dominic, no quiere salir de su habitación. Dice que se siente como un don nadie. He tratado de hacerlo entrar en razón, pero se siente demasiado avergonzado como para dejarse ver," me dijo, y asentí con la cabeza."Tienes que darle tiempo, Stephanie. Si Bryce no hubiera confesado, podría estar muerto ahora. Necesitará tiempo para recuperarse y superarlo." le dije, y ella me abrazó y comenzó a llorar.No supe qué decirle, así que la abracé de vuelta y le di unas palmadas en la espalda."Tienes que tomártelo con calma, Stephanie. Llorar no va a hacer que él mejore. Si lo quieres ayudar tráele algo que lo haga feliz o tráeles a sus amigos, para que lo animen. " le dije,

"Maurice me amaba con todo su corazón, pero todo cambió cuando la conoció a ella. Hasta ese momento nunca había estado con nadie más. Así como Sylvester es contigo, Maurice era conmigo. Tal vez no exactamente igual, pero tú sabes a lo que me refiero, en esos tiempos era muy diferente." Me dijo, con lágrimas en los ojos."Yo amaba a Maurice con todo mi corazón y pensé que nuestra vida sería perfecta, pero estaba equivocada. Conoció a Alissa y la tomó como su amante. Mi familia y el consejo no le permitieron reclamarla porque eso sería un insulto para mí, así que se acostaba con ella y me hizo soportar un dolor inimaginable. Esa mujer tampoco era una santa. Ninguna pareja destinada lo es, no por elección, sino por naturaleza. Ninguna pareja destinada querría ser solo una amante. Nos ven como intrusas y ladronas de sus parejas, así que hacen lo que sea para reemplazarnos por completo y no tener que compartir a su pareja con nosotras.Ella conspiró en mi contra y manipuló a mi esposo. Ella

La abracé y le dije que todo estaría bien antes de salir de su habitación y dirigirme a la mía. En el camino, me encontré con Lily, quién miró mis pies.Algo que había notado fue que ella se la pasaba caminando cerca de nuestra habitación, aunque sabía que Sylvester era amable con ella, la zona de las mujeres era otra."Buenas noches, Luna." Me dijo de manera muy respetuosa."Hola, Lily." Respondí, entonces señaló mis pies descalzos."¿Acaso es por el embarazo? " Me preguntó con un toque de celos en su voz, yo sonreí."No querida, es para caminar por ahí de forma silenciosa, sin que se den cuenta." Respondí y seguí caminando.Sentí cómo su mirada apuntaba hacia mí, así que me giré para guiñarle un ojo. Quería que se sintiera relajada y al mismo tiempo un poco nerviosa. Las personas tienden a cometer errores más rápido cuando están nerviosas que cuando están tranquilas.Entré a la habitación y me acosté, al instante, Sylvester me rodeó con su brazo y besó mi cuello."La cama estaba fría

~Sylvester~No podía creer lo que Tamia me acababa de decir acerca de Lily. Estaba tan furioso que sabía que Knight podría aparecer en cualquier momento.Miré a mi mujer, no parecía que estuviera bromeando. Por la expresión en sus ojitos verdes, supe que le había costado mucho contarme todo eso.Levanté la mano y le toqué la cabeza suavemente, luego le besé en los labios. Fue más para calmarme que para hacerle saber que estaba bien y no iba a volverme loco, porque sentía la furia correr por mis venas, pero tenía que pensar con cabeza fría y calmarme para saber cómo manejar un asunto tan grave.Lily ya de por si era un gran problema y si me estaba traicionando, entonces era yo quién estaba en serios problemas porque ella sabía de mis investigaciones y me estaba ayudando con una de ellas.¿Qué pasaría si le estuviese pasando la información a alguien más?No supe qué me pasó, pero cuando llegó la vi tan dulce, mientras actuaba con la inocencia de una mosquita muerta con la que nadie sospe