Audrey había organizado una cena en Tentaciones Dos para celebrar que el nuevo club estaba terminado y que después de tanto trabajo en conjunto realizado en Tentaciones Dos, todo había salido bien. El club ya era económicamente estable y podría funcionar por muchísimos años. Había muchos socios que no dejaban de llegar. Afrodita no estaría interesada en ir, pero Audrey se encargaría de convencerla. Primero ella le avisó a Christian sobre la cena y él aceptó ir. Luego se lo dijo a su amiga porque estaba segura de que no lo dejaría ir solo. Sabia bien los celos que sentía Afrodita por Zaira y que por nada del mundo ella dejaría a su novio solo en un lugar donde ella estuviera. Días más tarde, todos los preparativos para la cena estaban en marcha. Audrey se sentía más que feliz por tener una cena con gente tan agradable y sin tener que cuidar niños. Era un momento para disfrutar entre adultos, buena música y probablemente varias canciones divertidas. Audrey buscó canciones para animar

Christian había observado a su novia bailar con Zayn. Había notado que él estaba muy cerca y que en un momento sus rostros habían quedado a poca distancia. Para él no había sido una simple casualidad, sino una muestra de deseo por parte del futuro jefe de su novia. -¿Por qué miras así a Zayn? Es muy guapo, ¿Qué mujer sería capaz de resistirse a semejante hombre?- Zaira se había acercado con dos copas, aprovechando que Afrodita parecía discutir con Audrey -Afrodita es hermosa, ¿No desconfías de él?- Christian se mostraba demasiado serio -¿Por qué desconfiaría de él? No podría negarle a ninguna mujer estar con un hombre tan complaciente. Se que su amor es mío, su cuerpo podría compartirlo- Zaira le guiñó el ojo y Christian la observó con incredulidad -Yo no compartiría a mi novia- Dijo tajante y ella acarició su brazo -A Zayn no le importaría compartirme. Las fantasías existen para ser cumplidas. Tal vez podrías convertirte en una de las mías- Le guiñó el ojo y se alejó de él segund

Afrodita se durmió lamentando haber ido a la fiesta. Los celos infundados de su novio le habían arruinado la noche. Le molestaba que el no confiara en ella, ¿Cuando le había dado motivos para dudar? Recordó el momento exacto en que su rostro y el de Zayn habían quedado tan cerca. Ellos solamente se habían mirado a los ojos de manera retadora, ¿Christian no pudo ver qué solo estaban discutiendo y en medio de una guerra de palabras como cada vez que debían hablar? Zayn era el último hombre con el que estaría en el mundo y él tampoco la deseaba, eso era positivo. Por otra parte, eran crecientes sus dudas referentes a lo que Zaira había hablado con Christian, ¿Qué le había dicho esa atrevida mujer? Ella a los ojos de los demás era simpática y divertida, pero a los suyos una persona muy poco confiable que no le causaba diversión en absoluto. Le resultaba vulgar en su máxima expresión, ¿Por qué tenía que ser tan sugerente? Ese tipo de comportamientos era mejor que ocurriesen en la privacid

Christian no sabía que él apartamento de su novia estaba pronto a convertirse en un lugar perfectamente habitable. Él sabía que cuando ella estuviese viviendo allí sería el momento en que dejaran solo de besarse y pasaran al siguiente nivel, algo por lo que había esperado meses. Audrey había entrado a la oficina de Afrodita sin tocar. Ella siempre se veía feliz, mientras que la arquitecta, todo lo opuesto. -Si logro acabar algunos pendientes temprano, podré colocar los últimos detalles en tu cuarto y podrás mudarte. Estoy tan feliz por ti- Afrodita sintió dudas y sonrió con preocupación-Christian querrá hacerlo y creo que no es el momento, ¿Cómo sabré si estoy lista?- Audrey sonrió con dulzura, su amiga aunque se mostrara fuerte era realmente un ángel asustadizo -Si estás segura de amarlo y en verdad deseas hacerlo, simplemente deja que el te guíe a tu cuarto y no pongas frenos- Afrodita suspiró para tranquilizarse y asintió-Este mes mi relación mejorará- Sonrió imaginando que des

Afrodita se sentía perdida. Su relación parecía haberse estancado y luego los problemas habían empezado. Los celos, las discusiones y los distanciamientos eran cada vez más habituales. ¿Dónde había quedado la paz que sentía al inicio? ¿Dónde estaba la relación perfecta que tan bien la hacía sentir? Christian, por otra parte, seguía sintiendo deseos de estar finalmente con su novia virgen. ¿Cuántos meses más debería esperar? Había soportado mucho tiempo y también varias excusas. Para él, esperar fue en vano. Cuando finalmente ella lo invitó estando a solas, simplemente parecía que no quería hacerlo. ¿Hasta cuándo seguirían así? Ella entró a su apartamento y fue directamente a la cama, dió mil vueltas pero no pudo conciliar el sueño rápidamente. Estaba preocupada y sentía que estaba perdiendo su relación sin poder hacer nada para revertir eso. Procedió a enviarle un mensaje a Christian, buscando explicarle lo que esperaba, aunque no sabía bien que era. "Amor, se que estás molesto. ¿C