La señora Brighthall dejó escapar una sonrisa de autodesprecio al ver a Kyran. "Eres mi hijo, pero verte es aún más difícil que escalar el mismísimo cielo. Ha pasado casi un año desde la última vez que te vi. No habrías venido a verme si no hubiera tenido un accidente, ¿verdad? ¿Tanto me odias?".Su voz estaba llena de tristeza y decepción. Había pasado por muchas cosas desde que echó a Deirdre. Su familia se había desmoronado y ninguno de ellos se preocupaba por los demás.El rostro de Kyran carecía de emoción cuando dijo: "No lo pienses demasiado. Solo estoy ocupado"."¿Ocupado? ¿Me estás diciendo que estás ocupado hasta el punto de que ni siquiera puedes venir a casa a verme, aunque estás a unas pocas manzanas?".Kyran se limitó a guardar silencio.La señora Brighthall suspiró y dijo, culpándose a sí misma: "Pensé que te estaba haciendo un favor al enviar a Deirdre lejos. Pensé que te estaba ayudando a mantener a tu familia, que tanto te ha costado conseguir, pero no esperaba q

"Estoy celosa de ella, pero Brendan... ¿no son los celos algo normal? Es que te amo demasiado. ¡Cuando nuestras emociones nos ciegan, somos propensos a hacer muchas estupideces! Además, ¡ya sé que he hecho algo mal!".Brendan levantó la cabeza y sus ojos se llenaron de decepción. Ya no podía relacionar el rostro de la mujer que lloraba frente a él con la mujer del mar de fuego. Incluso hasta ese momento, ella seguía defendiéndose. Todavía no conocía su error."¿Solo porque estás celosa de ella, contrataste a alguien para secuestrarla? Entonces, ¿eso significa que puedes simplemente matar a alguien y encogerte de hombros como si no hubiera pasado nada cuando estás celosa de esa persona?". Charlene se quedó de piedra. "¡Yo no la maté! ¡Sigue viva! ¡No la maté!".Brendan se puso la mano en la sien y dijo: "Charlene, ¿crees que no sé lo que hiciste?". Su voz estaba cargada de rabia y sus ojos se habían enrojecido. Miró fijamente a la mujer que tenía delante y continuó: "¿Crees que e

'Es imposible que sea Kyran. Kyran todavía está en Germia. Necesitará casi un día de vuelo solo para un viaje de ida y vuelta, así que es imposible que esté en la comisaría'.Sin embargo, si la figura que tenía delante no era Kyran, ¿por qué le resultaba tan familiar? Era como si conociera a esa persona desde hacía mucho tiempo...Las yemas de los dedos de Deirdre temblaron al preguntar: "Kyran. ¿Eres tú?". El rostro de Brendan estaba ensangrentado mientras se colocaba frente a ella. No esperaba que Deirdre apareciera en la comisaría, ni que se encontraran.Por un momento, un sinfín de pensamientos revolotearon por su cabeza. ¿Iba a admitir que era Kyran? ¿O debía limitarse a decir que ella lo había confundido con la persona equivocada y marcharse? En ese momento, Charlene se liberó de su encierro y salió corriendo de la habitación. Mientras corría hacia Brendan, gritó desesperada: "¡Brendan! ¡Brendan! ¡Por favor, dame otra oportunidad! ¡Brendan! ¡Te prometo que no volveré a hac

Sin embargo, todo esto era culpa de Brendan. Estaba más allá de la redención y no había nada que pudiera hacer para que ella lo perdonara."Retráctate, Deirdre", le ordenó Brendan, con voz fría y aliento áspero. Deirdre se burló y dijo: "Tú te lo buscaste, ¿y ahora no puedes aceptar lo que hiciste?"Si ni siquiera tú puedes aceptar las malas acciones que cometiste, ¿qué te hace pensar que yo puedo perdonarte? Brendan, tú-".Su corazón se llenó de dolor al escuchar sus palabras. Antes de que ella pudiera terminar la frase, Brendan bajó la cabeza y apretó los labios contra los suyos, con una emoción desbordante.Era como si intentara impedir que ella dijera algo que él no podía aceptar.Los ojos de Deirdre se abrieron de par en par, incrédula. Los suaves labios del hombre hicieron que su mente se quedara en blanco. A continuación, una interminable oleada de ira, vergüenza y asco la abrumó.Impulsada por su rabia, lo abofeteó en la cara, aturdiéndolo. Se le hinchó un lado de la me

"Yo tampoco tengo la menor idea", dijo Brendan aturdido. "Lo ocultaré todo el tiempo que pueda".Solo esperaba que ese día no llegara tan pronto. Así tendría más tiempo para compensarla. -Deirdre se había quedado en la casa los últimos días. Ni siquiera abría la puerta porque tenía demasiado miedo. Por lo que sabía de Brendan, confiaba en que vendría a buscarla al día siguiente. Sin embargo, habían pasado tres días y no había ocurrido nada. Todo estaba muy tranquilo, como si Brendan no hubiera aparecido nunca por la ciudad.Deirdre incluso empezó a preguntarse si había sido un sueño encontrarse con Brendan aquel día en la comisaría. Sin embargo, la sensación abrasadora cuando los labios del hombre caían sobre los suyos y su tenacidad seguían recordándole que todo había sido real. Brendan había estado allí y se habían encontrado. Era solo que Brendan aún podía estar preocupado por el caso de Charlene, por lo que no podía permitirse el lujo de preocuparse por Deirdre. Al cu