―Eso ya lo veremos, recuerda que sus padres quieren que sea novio de verónica ― dijo James sonriendo maliciosamente. ― No, si yo les digo de como eres en realidad ― contesto Kendall furioso. ― ¿Y crees que te van a creer? Por favor, si tus padres me adoran ― contesto James sonriendo triunfante mientras que Kendall le soltó un golpe. ― ¡Juro que te arruinaré! ― grito Kendall enfurecido. Mientras que James estaba sonriendo sobándose el golpe que Kendall le había metido. ― Hay Schmidt, no sabes con quién te metes ― contesto James burlándose. ― No que tengo miedo, Maslow ― refuto Kendall de vuelta con odio en sus palabras. ― Deberías porque no sabes de lo que soy capaz ― respondió James sonriendo maliciosamente. ― Me tienen sin cuidado tus amenazas ― contesto Kendall mientras azotaba la puerta con fuerza. Quien de inmediato se va a su carro, mientras que James solamente sonreía triunfante jurando hacerle la vida de cuadros a Verónica y a Kendall para también sacarlo de su camino.

― Lo sé, pero te vi sufriendo, tanto Harry te he visto preocupado, yo quería que ya no trabajarás tanto y que tuvieran un poco más de dinero para que pudieran comprar las medicinas ― le dije tratando que aceptara este cheque, pero él no quería recibir ayuda de nadie. ― ¡No quiero tu dinero! Solo te quiero por Lo que eres, no por lo que me puedas dar ― gritó Harry, estaba exaltado y molesto. ― Entiende que no quiero tu dinero, por eso tengo manos, pies, sé cantar y lucharé por salir adelante, te lo juro Verónica ― me dijo Harry dejándome sola en aquel pasillo. Por lo que algunas lágrimas cayeron sobre mis mejillas quería ayudarlo, pero él se negaba hay veces que Harry era orgulloso y más por su porvenir, él estaba empeñado a salir adelante sin ayuda. Por otro lado, James veía que yo estaba llorando yendo tras de mí y abrazándome a la menor provocación, por lo que yo me limpie las lágrimas rápidamente. ― ¿¡Te quieres!? ― le contesté de mala manera. ― Vaya lo de Harry el ordinario

Me volteé a ver a mi hermano, quien estaba parado leyendo un pequeño libro que había agarrado de la biblioteca. ― Vamos, no lleguemos tarde a casa ― le dije a Jack mientras que él guardaba su libro.― Si hermano hay que irnos ― contesto Jack mientras agarraba su guitarra, por lo que yo le di el dinero a mi hermano para que lo guardara en su mochila. Por lo que ambos caminamos hasta llegar a la parada de autobuses tomamos el transporte estábamos tan cansados que quería rendirme y acostarme por ahora al llegar al departamento vi a mi madre que nos estaba esperando por lo que me arrodille y bese la frente de mi madre. ― ¿Mamá que haces despierta? ― pregunte un tanto preocupado al verla a mi mamá despierta. ― Quería esperarlos― dijo mi madre sonriendo. ― ¿Y Martha? ― pregunto Jack preocupado, pensó que la habían dejado sola. ― Aquí estoy ― dijo Marta saliendo de la cocina. ― Mira ten ― contesto Jack mientras sacaba un dinero para dá

― ¿Mariana estás bien? ― me preguntaba Jack mientras besaba mi frente. ― Si Jack, pero James ... ― le dije un tanto temerosa.― No le hagas caso mi amor olvídalo ― me dijo Jack mientras me sonreía. ― Te mande una nota ¿La recibiste? ― le pregunte de vuelta haciendo que él me sonriera. ― La llevo conmigo ― me dijo Jack sacando la nota de su mochila mientras me besa otra vez en los labios. ― ¿Te digo algo? ― me pregunto Jack de vuelta haciendo que yo le sonriera. ― Dime mi amor ― le dije mientras le sonreía. ― Eres una princesa, solo mi princesa te amo Mariana ― me dijo Jack mientras besaba mis manos. ― Yo también te amo Jack ― le dije sonriendo con sinceridad. Por otro lado, Martha había ido al hospital con Gloria para checar su enfermedad, pero la verdad ella se sentía peor que nunca, pero aún esperaba que las noticias fueran buenas. ― Dígame como sigo con mi enfermedad ― dijo Gloria sonriendo un poco, ella estaba segura de que se curaría, pero para su mala suerte no se curaba

― Siempre juntos Mariana, mi ángel siempre juntos ― le contesté sonando sincero jurándole que nunca la lastimaría. Besaba sus manos como también su mejilla jamás supe como empecé a amarla, solo sé que este amor jamás desaparecería. Dos meses después …. 23 de marzo de 1984 La enfermedad de Gloria se deterioraba cada vez más, Jack y Harry no sabían nada acerca de que su madre le restaba solo unos escasos 5 meses de vida, estaban preocupados, pues a su mamá no podía bañarse, sola necesitaba de un tanque de oxígeno para que la ayudara a respirar el dinero no alcanzaba trabajando en aquel restaurante no sabían de donde sacar dinero deciden comprar un periódico buscando trabajo en las noches… Ya sea de meseros, de lo que sea, pero necesitaban, sacar dinero para poder pagar las medicinas y una enfermera a su mamá, pues, aunque Martha los ayudará, no podía sola, pues, aquello era difícil, tanto que muchas veces no sabían qué hacer; sin embargo, Harry compro aquel periódico para encontrar