“¡Por eso quiero que preguntes!”. Brittany caminó alrededor de la mesa, le agarró del brazo y lo meció suavemente. “No es para tanto. Solo tienes que revisar algunos detalles. ¿No puedes ayudarme con este pequeño asunto?”.Después de todo, no era para tanto. Pero, ¿de dónde había oído ella esa tontería? Brandon frunció el ceño y la miró con asco. “¿Cómo puedes siquiera creer eso? ¡Recuerdo que estabas actuando muy segura de ti misma! ¿Acaso has visto alguna vez a Alex con otra mujer? Pensaba que ya habías ahuyentado a todas las mujeres que intentaron acercarse a él. Además, considerando su forma de actuar, probablemente creería que es gay si me lo dijeras. Por cierto, ¿crees que tenga algo con otro hombre?”. Dijo esto con toda seriedad, convencido de que su punto de vista era el más sensato.Brittany cerró su pequeño puño y lo golpeó con fiereza. “¡Tonterías! ¡Seguro que tú eres más gay que él! ¡Solo ayúdame con lo que te pedí! ¿Por qué estás haciendo tantas preguntas?”.Al

Alexander no estaba inventando excusas, ya que de verdad estaba ocupado. Después de todo, era final de año. Tenía que pensar en los estados financieros de fin de año, los informes y resúmenes de varias oficinas, la gestión de recursos humanos y otros. Alexander tenía demasiadas cosas de las que encargarse.Por supuesto, esta no era la única razón por la que estaba tan ocupado. Podía tomarse su tiempo hacer estas cosas, pero quería terminar cuanto antes para poder pasar tiempo con su esposa. En el pasado siempre trabajaba meticulosamente, y no le importaba si necesitaba quedarse largas horas en la oficina, incluso si tenía que trabajar en vísperas de Navidad.Sin embargo, ahora las cosas eran diferentes. Ahora, Alexander tenía a alguien a quien quería dedicarle todo su tiempo.Alexander estuvo ocupado toda la tarde. Cuando revisó el reloj después de la última reunión, se dio cuenta de que había trabajado algunas horas extra. Alexander ansiaba irse a casa. Se dirigió a su oficina e in

“No la conoces”, dijo Alexander.Brandon casi lo maldijo. ‘¡Qué m*erda! ¡¿Cómo solo va a decirme que es alguien a quien no conozco?! Es como si no me contestara’.Pero si era alguien que Brandon no conocía, lo más probable era que no perteneciera a una familia rica o famosa. Puede que no conociera a todos los solteros elegibles, pero conocía a todas las damas elegibles de su círculo.Brandon no estaba presumiendo, pero podía nombrar a todas las damas y mencionar sus características; quién era hermosa, quién tenía mal genio o quién tenía un talento excepcional.Pero Alexander dijo que Brandon no la conocía. ¿Quería decir entonces que no era una de esas damas? ¿Qué antecedentes tenía entonces? ¿Era una campesina? ¡Imposible! Los Russell eran una familia influyente y rica. ¿Cómo iban a permitir que se casara con alguien así?“Incluso si no la conozco, debe tener un nombre, ¿no? Además, ¿acaso tu familia te permitirá casarte con una campesina? No me digas que te enamoraste de una Ceni

Brandon solo pudo quedarse mirando mientras el coche se dirigía hacia Colina Imperial. Los guardias de seguridad de Colina Imperial eran estrictos y estaban bien equipados. Si llegaba alguien que no era uno de sus residentes o no iba acompañado de un residente, no podía entrar en el complejo. Además, los guardias de seguridad no sabían quién era Brandon. Por lo tanto, seguían rehusándose a permitirle la entrada incluso después de intentar hacerles entrar en razón. Sin embargo, Brandon no era alguien que se rendía tan fácilmente, y su curiosidad también se vio avivada por el comportamiento de Alexander. Quería ver qué clase de mujer se había enamorado Alexander, o de lo contrario, no podría dormir por la noche. Después de asegurarse de que no había nadie alrededor, Brandon estudió las vallas que rodeaban el recinto y se dio cuenta de que no eran muy altas. Encontró un rincón apartado y se aseguró de que podía trepar por él. Fingió irse, pero volvió al mismo lugar y trató de trep

Ante la indiferencia de Alexander, Brandon no se dio por vencido. Más importante aún, la casa de Alexander era cálida y reconfortante. El cuerpo de Brandon se recuperó de la descarga eléctrica y por fin pudo volver a moverse, así que se levantó del suelo y fue a sentarse en el sofá.Alexander lo fulminó con la mirada, pero a Brandon no le importó, ya que su trasero quedó firmemente pegado al sofá. “Vamos, no me mires así. Me has echado de tu coche y me has electrocutado en el mismo día, pero no me estoy quejando”. “Todo lo que quería era echar un vistazo a tu prometida. ¿Por qué te esfuerzas tanto en esconderla? ¿Acaso es porque es tan fea que te da vergüenza…?”. Luego de notar la mirada de furia de Alexander, Brandon no se atrevió a continuar. “De acuerdo, de acuerdo. Solo estoy intentando ayudar. Tu secreto ya se hizo público, así que no tiene sentido intentar ocultarlo. Además, no pensabas esconderla, ¿verdad? Ya que has decidido casarte, ¿por qué no me la presentas de una vez?