Durante el tiempo restante que tuvo que trabajar en la empresa del señor Anderson, Isla subió cada día a la oficina como alma en pena. Se sentaba en su escritorio y bajaba la cabeza, con la esperanza de que nadie le dirigiera la palabra.¿Te sucede algo?  le preguntó Amara en varias ocasiones al llegar y verla en esa condición.Solo estoy cansada.  respondía Isla.  He estado durmiendo mal.–El señor Anderson me comentó que nos daría una sorpresa.  le dijo Amara en tono bajo para que nadie la escuchara, pero emocionada a la vez.  Creo que tiene que ver con tu despedida, ya que dentro de muy poco te iras. ¡No tienes idea de cuánto te voy a extrañar!Al escuchar el nombre Sr Anderson, Isla comenzó a temblar, a pesar de saber que inevitablemente sus caminos se cruzarían, nunca estaba lista para a verlo.¿En serio no te pas

¿Qué te ocurre que dejaste de hablar de repente?  le preguntó Isla.Es solo que, me distraje mirando a los chicos jugar futbol, y creí ver una cara conocida.  respondió Ava.  Pero fue solo un error.¿A quién creíste ver?  preguntó Isla una vez más. A un chico que conocí antes de entrar aquí.  respondió.  Se suponía que sería solo cosa de una noche, pero no consigo sacarlo de mi mente.Ah, ya entiendo.  dijo Isla.  A mí me ocurre algo parecido. Hay una persona, a quien, sin importar cuanto lo intente, tampoco logro sacar de mi mente.Parece que ambas nacimos para sufrir por amor.  dijo Ava sonriendo.Antes, cuando me pediste venir contigo, ¿a qué te referías cuando dijiste que habías perdido a tu única amiga?  preguntó Isla, más por hacer te

¿Estás hablando en serio?  exclamó el idiota de la playa al escuchar la respuesta de la chica.Nunca antes hablé tan en serio.  respondió ella mientras se vestía.No seas así.  dijo él, casi que rogándole.  Quédate un rato más conmigo.No puedo.  replicó la chica. Como quieras.  respondió él, ya que no quería verse demasiado necesitado.Una vez los dos estuvieron completamente vestidos, caminaron rumbo al dormitorio de las chicas, que se encontraba al otro lado del campus.Me gustó mucho verte esta noche.  dijo él, cuándo ya se encontraban cerca de su destino.A mí también.  respondió ella y suspiró mientras se detenía para preguntar: No me lo dirás, ¿verdad? Te hice una promesa.  respondió é

Casi a las cuatro de la mañana, borrachas y felices de la vida, las chicas regresaron a la residencia estudiantil. Estaban tan mareadas, que terminaron durmiendo todas en la habitación de Hope y Emily, que era la más cercana a la puerta de entrada. Ni siquiera se cambiaron la ropa que traían puesta, o se desmaquillaron, por lo que no resultó extraño que, cuando sonó el despertador a las ocho de la mañana, apenas tenían fuerzas para levantarse.Vamos chicas, no podemos llegar tarde.  dijo Isla mientras trataba de levantar a Ava de la cama.Solo un ratito más.  pidió Hope, aun media dormida.Isla, que era la más entera, tiró de las otras tres, hasta que finalmente vinieron en sí. Luego ayudó a Ava a ponerse de pie, y fueron a su habitación para arreglarse.Tomaron una refrescante ducha, y sin siquiera peinarse, se vistieron con lo primero que en

A la mañana siguiente, las cuatro chicas se reunieron para bajar juntas a sus aulas, y por el camino conversaron sobre la cita de Isla.Tienes una cara de enamorada que no puedes con ella.  le dijo Emily riendo.Les juro que no pensé que podría llegar a sentir algo así por un hombre, al menos, no tan rápido.  respondió Isla.La primera semana de clases ha sido buena ustedes.  les dijo Hope a Isla y Ava.  Desearía haber conocido a alguien especial.No te apresures Hope.  le dijo Emily.  Lo bueno tarda en llegar.Será que finalmente estoy destinada a esperar por Andy.  dijo Hope.  Si no he conocido a nadie en todo este tiempo, quizás deba tomarlo como una señal.¡Todo este tiempo!  exclamó Ava entre risas.  Venga Hope, llevas solo cuatro días aquí, y hablas como si se tratase de cuatro años. T