*—Sapphire: El vestido le sentaba bien. Claro, había sido hecho a medida. Era de color rosa palo y de encajes, el cual llegaba hasta sus pies y era ajustado a su cuello dejando al descubierto sus hombros. La estilista la había maquillado de forma algo suave, sus labios estaban pintados en un tono rosáceo y sus ojos verdes resaltaban gracias a la sombra que la mujer la había aplicado. Había peinado su cabello en una coleta ondeada, lo cual le daba un toque sencillo. Se veía bien, incluso parecía más mayor, aunque solo tenía 17 años. Miró hacia Kylie, la prima de la novia. La chica tenía un vestido igual que el suyo con la diferencia de que este era de tirantes. Kylie estaba despampanante. Tenía la misma coleta solo que no tenía el flequillo en la frente que Sapphire tenía y que no tenía el cabello rubio como ella. Kylie en verdad era impresionante, desde la primera vez que la vio se había dicho que la chica podía ser modelo o algo así.

 *—Sapphire:Sus niveles de adrenalina estaban por encima de lo normal. Se llevó una mano al corazón y se dio cuenta de que esta estaba temblando. Bueno, no todos los días te encontrabas con tu ex, aunque bueno, Samuel no era su ex, solo había sido alguien con quien había dormido y de quien se había enamorado tontamente.Sapphire miró hacia Kyle quien calmaba a su hijo entre sus brazos. Estaba segura de que su hermano había escuchado todo. Lo veía en su mirada. Se mordió el labio inferior y se preguntó cómo iba a salir de aquella situación. Kyle era muy diferente a Charlie. Charlie era serio, sí, pero Sapphire sabía que este había ignorado lo que sucedió entre Samuel y ella en el viaje quien sabe porque, pero que Kyle lo escuchara y que además escuchase todo lo que sucedió después del viaje, sobr

  *—Samuel: ¿Acaso este era su castigo por tomar aquella mala decisión hace un año? Samuel se rio de su desgracia y extendió una mano hacia la mesita de centro en su sala, tomando su vaso casi vacío con whisky. Lo apuró y cuando lo dejó vacío sobre la mesa. Se puso de pie para ir a buscar otra botella en su cocina. Esta era su vida ahora. Habían pasado dos semanas desde la boda y todavía no había podido recuperarse del rechazo de Sapphire. Después que Sapphire se fue con su hermano Kyle, dejándolo, Samuel no había podido recuperarse. Era un asco de persona ahora. Encontró otra botella y la llevó consigo a la sala. La abrió y se sirvió otro vaso hacia el tope. Así era como pasaba los días desde la boda. No recordaba cómo había llegado a su piso después que arruinase la celebración de la ceremonia, pero lo que sí recordaba es que desde entonces se la pasaba bebiendo y comiendo porquerías hasta que terminaba cansado y borrac

 *—Samuel:Volvía a los andares de antes y no se sentía tan bien como había creído.Samuel había decidido rendirse con Sapphire porque no tenían oportunidad y se había lanzado de cabeza en la vida llena de fiestas y alcohol. Incluso había dejado su trabajo de medio tiempo y ahora vivía de la caridad de sus padres. Ya llevaba una semana en ello y había creído que esto le haría olvidar, pero ahora se sentía fatal y sucio.Fijó la vista en la cerveza que tenía en la mano. La sentía ya caliente de tanto estar en esta. La había tomado antes para comenzar la borrachera de la noche, pero ni bien la saboreo, le dio nauseas. El sabor de la cerveza comenzaba a cansarlo. Sabía asquerosa.Soltó un suspiro y dejó la cerveza en una mesa en el momento que una chica se acercaba a Samuel. Este suspi

 *—Samuel:Se había afeitado la asquerosa barba que había tenido desde la boda de Charlie, se había lavado el pelo largo y se había dado una buena ducha. Esto le había sentado tan bien. Se sentía más animado y más fresco. Se sentía muy bien. Esto era un buen comienzo. Esperaba que el día siguiente se levantase de la misma forma.Entró en la habitación y se estaba secando el pelo con una toalla cuando escuchó su móvil sonar en alguna parte de su cuarto. Samuel lo buscó con la mirada y vio que este tenía la mitad debajo de los pantalones que había tenido antes. Se acercó a este cuando el timbre de llamada había cesado. Lo alzó y lo comprobó.Era una llamada… ¿de Charlie?Samuel arqueó las cejas y se preguntó porque Charlie lo estaba llamando. Hab&iac