Viernes, 2:30 am

No entendía mi loca y fascinante semana, porque había demasiada locura en ella como para poder entenderla, apenas tenía 3 días trabajando en Blue Oceans y sentía que llevaba allí toda una vida, con el equipo de trabajo me sentía en confianza, había muy buena vibra entre nosotros y lo pasábamos bien.

El trabajo aunque realmente era arduo me fascinaba lo que estaba haciendo, trabajábamos en ese momento en un evento de apertura, para el inicio de un nuevo programa, se trataba de una movida para dar a conocer la importancia de los arrecifes de coral, para nuestra existencia.

Era un trabajo realmente fascinante aunque inquietante a la vez, durante esos días descubrí un millón de cosas que nos pasarían como raza si las cosas no funcionaran adecuadamente en los océanos y bueno la información comenzaba a afectarme, yo y mi tendencia a exagerar un poco las cosas.

 En fin, después del choque de mundos entre Andrew y yo ese Miércoles no volvimos a vernos, aunque de verdad anhelaba poder mirar su cara, de alguna extraña y retorcida forma mi cuerpo anhelaba y necesitaba verlo, odiaba ese sentimiento porque venga hombre el tipo era un pedazo de imbécil, pero aun así algo me decía que había algo más.

El Andrew que vi en el submarino no fue para nada el Andrew que vi llegar al Zafiro el día de mi entrevista, vi como su tripulación lo miraba, lo admiraban y no por las mismas razones por las que mi boca estaba babeando, además su postura con ellos su actitud no era ni un poco parecida con la que tuvo con los chico, Jake o conmigo.

Por cierto ese día me gane el apodo de capitana Marvel, —resulta que todos somos fans de Marvel, menos ¿adivinen quién? si, ella, la súper amiga Cristina— fue muy gracioso, cuando llegamos a la oficina todos me miraron como si no quisieran si quiera tocarme, cada uno se fue a sus lugares y comenzó a trabajar al cabo de unos 10 minutos Chris comenzó a reír por lo bajo y luego su risa se convirtió en una enorme y sonora carcajada que termino contagiando al resto, todos nos reíamos y yo no tenía idea de porqué, pero presentía que ellos si lo sabían.

Cuando finalmente dejamos de reírnos, Chris se levantó, se dirigió a la puerta y la cerro, se tiro en uno de los sofás y los demás lo siguieron supongo que era alguna de clave de movilización como ninguno me dijo nada, me gire para continuar con mi trabajo y bueno allí Chris me grito que me acercara y riéndome por su actitud me senté en un puff en el suelo cerca de ellos, todos me miraban con una enorme sonrisa en la cara, todos menos Cristina.

Ella me miraba como con asco, finalmente Chris me contó que nadie en el edificio había tratado de esa manera a Andrew, que solía haber pequeños enfrentamientos con él, pero discusiones en las que siempre el terminaba por pedirle a las personas lo más amable que era capaz de llegar a ser que se retiraran para continuar al final del día con lo que estaban haciendo, también me dijo que trabajar con él podía ser un poco estresante pero más que todo por su actitud fría y distante.

Les comente lo que había percibido en los muelles y me dijeron que Andrew era otra persona cerca del océano y que por supuesto los que ellos podían decir que lo conocían mucho mejor era su tripulación, de hecho todos afirmaban que si sus vidas dependían de Andrew este en ningún momento pensaría dos veces en dar la de el por alguno de ellos, pero eso era lo que decían los de la tripulación por lo cual me di cuenta que había como 2 grandes equipos dentro de Blue Oceans los que nos quedamos en tierra y los que salían al océano, todos y cada uno de ellos así no fueran de la tripulación decían que el Capitán de Hielo se derretía en mar adentro y salía otra persona.

Todo eso me llega a hacer pensar que Andrew sufría un trastorno de doble personalidad que créanme no pasó desapercibido ósea vivo con una loquera, obvio que iba a pensarlo. Es más Dani llego a pensarlo por un momento pero luego se metió en su bata blanca de profesional y me especifico las razones por la cual Andrew no podía y ni padecía ese trastorno, por lo cual le discutí un poco al respecto pero bueno ella es la experta no yo. Así que simplemente puntualizamos que era un grandísimo idiota con problemas de ira.

El resto de la semana fue un encanto, llegue todos los días 1 hora más temprano para ir al muelle y mirar el océano y sentir esa paz que me transmitía.

No, sé lo que piensan y no era por eso, no quería verlo a él, o bueno muy, muy, muy en el fondo si, quería verlo, pero no lo iba admitir al menos no en ese momento. En fin esos 2 días trabajamos en finiquitar cosas, el trabajo estaba casi listo, solo tuve que ayudar a Chris con unas cuantas cosillas y pues el resto del día lo pasábamos o jugando vídeo juegos, o abajo en el submarino, que se había convertido en mi lugar favorito en todo el mundo.

Durante esos días, pensé que podría tropezar con él, ya que solía bajar incluso sola a leer un libro por un rato y luego los chicos llegaban a molestar, en realidad lo pasábamos súper genial juntos.

Me habían hablado de nuestro jefe, porque si sorpresa Jake no era nuestro jefe directo, aunque lo había pensado, de eso me entere el Jueves finalizando el día cuando recibí una llamada a la oficina y por supuesto fue otro show, les cuento para que quede claro la loca opinión que tendrá mi jefe de mí en cuanto me vea, respondí el teléfono así.

—Departamento gráfico de Blue Oceans buenos tardes le habla la Capitana Marvel ¿en qué puedo ayudarle? —respondí de esa forma porque los teléfonos de la oficina tenían identificador de llamada, y ponía Matt y bueno ya en toda la empresa me conocían con ese nombre así que supuse que no había problemas.

Además todas eran muy buena onda allí y siempre estaban riendo, hasta los científicos que había conocido hacían bromas y reían, en fin Matt al escuchar eso guardo unos segundos silencio y dijo lentamente

—Aquí Nick Furia, necesitamos tu ayuda —yo explote en risas no esperaba que dijeran eso.

Chris y Sophi que eran los únicos que estaban en la sala en ese momento voltearon a verme con cara expectante, yo seguía riéndome aunque ya no tan alto, pero seguía haciéndolo Matt dejo de reírse y  me dijo.   

—Tú debes ser Asier, he escuchado hablar mucho de ti, bueno más que todo leer, pero si he oído un par de audios alabando tu esplendida labor con el capi, un gusto soy Matthew, tu jefe —en cuanto dijo eso mi risa se cortó de inmediato y abrí los ojos de par en par mirando a Chris y luego a Sophi que al verme empezaron a reír ellos.

Yo y mi mala costumbre de meter la pata hasta el fondo embarrarme y no conforme luego zambullirme en el lodo sólita sin que nadie me ayude. Matt empezó a reír de inmediato diciéndome que no me preocupara, que los chicos y el tenían un grupo en Whastapp pero que aún no me había agregado por razones obvias no conocía al resto del equipo y por resto se trataba de él y 2 diseñadores más.

Luego de una pequeña conversación que básicamente se trató del trabajo que había hecho hasta ahora pidió hablar con Chris y finalmente este nos contó que Matt regresaría al día siguiente y me dijo que mi trabajo realmente empezaría la siguiente semana, que me preparara porque lo que venía iba a ser una tormenta categoría 5, sus expresiones no mía.

Y así llego a este encantador momento, en la oscuridad de mi habitación, me desperté hace como 20 minutos para ir al baño y cuando llegue a la cama de regreso el sueño se había ido de paseo así que simplemente me quede tendida justo aquí donde estoy, hoy conocería a mi jefe Matt, Sophi después de la llamada, me había contado un par de cosas de él, cosas que en definitiva a ella le interesaban lo que me dio a entender que Matt le gustaba y bueno con la descripción que me dio de él, es muy posible que comparta con ella la opinión, pero esperaría hasta dentro de unas horas para confirmarlo.

Quería volver a dormirme, pero sabía que ya no tendría caso Morfeo me había abandonado y nada ni nadie iba hacerlo regresar por lo que me levante y decidí hacer un poco de ejercicio, si, a veces no muy a menudo hago un poco de ejercicio, no tengo el cuerpazo de una súper modelo pero tengo lo mío, cuando me levante y camine hacia el interruptor de la luz, pise algo con el piel por lo cual maldecí por lo bajo y luego lo active y poof se hizo la luz y yo la maldecí nuevamente como todas las mañanas.

Esa era mi pequeña rutina matutina odiaba el sol, la luz y todo lo que me apartara de mi adorado y amado mundo de los sueños, pero en ese momento simplemente la odie porque me gustaba estar a oscuras al menos a veces. fui hasta el espejo y me mire, me salude con la mano y mire mis súper shorts de Hulk y mi franela de Metallica me reí por mi atuendo y me cambien, me hice una enorme cebolla en lo alto de la cabello y empecé hacer estiramientos, luego hice unos cuantos abdominales, unas cuantas flexiones y ya luego me eche nuevamente en la cama con mi laptop, revisando las redes sociales haciendo tiempo para levantarme e irme a Blue Oceans, ese día me iría aún más temprano para pasar por el submarino y quedarme a leer, otro de mis pasatiempos favoritos.

A las 5:00 am me levante de duche, me coloque un jean negro, una blusa de tirantes negro con encajes un pañuelo rojo tipo los que usaban en el viejo oeste los vaqueros, tome unas cuantas pulseras del cajón, solté mi cabello lo alborote un poco y me maquille, salí a la cocina y prepare un desayuno americano para mí y Dani que despertó al rato y salió mirándome entornando los ojos por la luz y me dijo al verme

—Oh por dios nena ¿qué te paso, estas bien, necesitas que te lleve al hospital? —la mire mal y le dije

—Daniela si no quieres irte sin desayunar hoy por favor te agradezco que te comportes y no seas una zorra tan temprano, ya me basta que con que Morfeo me dejara a las 2:30 am como para que tu andes toda toca pelotas —ella me miro un poco  sorprendida por mi elocuente respuesta y me dijo

—Uy alguien no se levantó de humor hoy, relájate nena, solo bromeaba, es raro verte levantada tan temprano y más aún lista y con el desayuno hecho, que por cierto se ve delicioso, me sirves café por favor —me gire sin decirle nada.

Si, al parecer no estaba de muy buen humor hoy, aunque no sabía por qué, le tendí la taza de café y me senté a terminar de desayunar en silencio, Dani por el contrario ella, siguió parloteando sobre un paciente y un nuevo medico que la tenían babeando, dijo su nombre pero nunca le preste atención, termine mis huevos revueltos y mi tostada. Me levante deje las cosas en el fregador y me fui a mi habitación dejándola con la boca abierta por mi actitud, tome las llaves de coche, mi móvil, la cazadora de cuero negra y un morral, me mire en el espejo y me dije hoy eres todo una chica mala, medio sonreí y salí, a la cocina donde Dani aun desayuna al verme lista para irme me dijo

—¡¿Hey porque te vas tan temprano hoy?! En serio nena, ¿estás bien?  —la mire con cara de ¡ay no empieces!, señale el lava bajillas y en general la cocina y le dije.

—Te toca limpiar mi desastre —me di media vuelta levante una mano mientras caminaba hacia la puerta y salí.

Ya en mi coche, tome el móvil lo puse en silencio porque sabía que de un momento a otro mi súper histérica amiga haría su aparición telefónica para tratar de sonsacarme la información de los motivos de mi mal humor, aunque en teoría debería saberlo, llevamos viviendo juntas 2 años, sabe muy bien que cuando no duermo lo suficiente me convierto en un horripilante y despreciable ser, pero para no complicar más las cosas preferí evitar.

Lance el móvil al asiento del copiloto, busque el disco de Avanged Sevenfold lo puse, subí el volumen y en cuanto llego el dulce y maravilloso sonido de la guitarra eléctrica a mis oídos, sonreí y la vocecita que solía solo a molestar salió sonriendo.

—Yeah baby hoy será un día genial, si desde temprano tenemos esta actitud... como no se nos atraviesa el Dios de los mares hoy —sonreí de manera maquiavélica y me dije.

—Uy que ganas de verte tengo hoy —me reí y salí del estacionamiento.