Lilian
— Me siento en una película de espías — le susurro a Gabi a través del teléfono mientras busco la laptop en una habitación que supongo es la de Lena.
— No puede estar en un lugar tan complicado, fíjate debajo de su almohada — me acerco a la cama.
Escucho la cadena del baño y eso solo indica que se me acabo el tiempo.
—La puta madre, ¿Cómo lo entretengo más tiempo? — susurro molesta.
— No lo sé Lili, pero necesitamos conectarnos a esa Laptop — resoplo.
— No voy a acostarme con él, lo beso un poco más y algo se me ocurrirá.
— Menos mal que Danniel no es celoso, suerte Lili — corta la llamada y salgo de la habitación acomodándome nuevamente en el sillón y cuando Uriel sale del baño no parece que me haya movido.
¿Qué Danniel no era celoso? A mi Dan le dará un infarto si sabe que bese a Uriel, no quiero hacerlo, pero él cree que vine a tener sexo con él.
— ¿Tomamos algo? — sugier