NATANAEL DÍAZ

En cuanto mires el mensaje de mis alarmas se habían encendido y ni siquiera me imaginaba una circunstancia como esa, tan sólo pensar en las limitaciones hacía que mi cabeza explotara, nunca mi enfrentado algo como esto, pero lo más extraño es que de la noche a la mañana hubiera sucedido esto, no perdí más tiempo y enseguida tomé el coche para ir rumbo hacia la casa de Rodolfo, todo esto era bastante extraño y necesitaba saber el por qué de la quiebra.

No puedo creer que todos los problemas estaban poniendo, primeramente la ruptura de mi matrimonio, después vino la separación de mi hijo, la proposición de mi hijo y tantas cosas que estaba viendo en tampoco tiempo, parece que el destino estaba conspirando para mi destrucción, quizás todo esto me lo merecía por la mala persona que había sido incluso por los malos pensamientos que tenía al haber intentado secuestrar a mi propio hijo, a lo mejor todo esto me lo estaba mereciendo y tendría que aceptar que soy una mala persona