Una esposa para el conde. Capitulo 43
El trayecto hasta Clarity Manor resultó bastante agotador para Anabelle, por lo que no tuvo tiempo de reñir con el conde. Por su parte, Thomas había preferido acompañar el carruaje montado a caballo para evitarle disgustos a su mujer. Sin embargo, estaba a punto de reventar por los nervios que le generaba el estado deplorable de su futura esposa.
—Es normal… —decía su nana, tratando de calmarlo.
Sin embargo, no lo hizo hasta que llegaron a destino y hubo cargado a Anabelle en sus brazos, para subir las escaleras y meterla él mismo a la cama.
—Espero que todo sea de tu agrado. Si hay algo que desees cambiar, puedes ordenarlo y lo harán sin problemas —dijo Thomas en la alcoba que antaño fuera de la antigua condesa.
—¿Puedo cambiar de prometido? —riñó Anabelle, cruzada de brazos, semirrecostada en la cama y apoyando la espalda a las almohadas.
—Tu futuro esposo, no se encuentra entre las opciones disponibles en la lista de cambios —replicó Essex, bastante exasperado—. Mañana se casa el d