Capítulo 56
Helena
Tenía sentimientos conflictuados en mi interior, sabía y percibía en el fondo de mi corazón que Santiago no quería tener más hijos. La culpa se albergaba dentro de mí, por no habernos seguido cuidando y de esa manera, nada de esto hubiese acontecido.
Yo sí quería tener un hijo con el hombre que amo, pero ahora temía por mi vida y porque si muero dejaré a Santiago como padre soltero de Julieta y del hijo que espero si yo no salgo con vida de esto. Llegando a casa, él me ayudó a bajar del carro y a instalarme en nuestra habitación.
–Helena, no te voy a echar mentiras. Me siento atemorizado por lo que pueda pasar, Julieta ha perdido a Karla y yo no quiero que te pierda a ti y yo tampoco quiero perderte.
Santiago se abrazó a mí y de esa forma ambos pudimos llorar confesándonos entre lágrimas nuestras inquietudes y temores, en ese abrazo se combinaba nuestro inmenso amor con nuestro más profundo miedo.
–No te sientas mal Santiago, yo también tengo mucho miedo. No quiero