Capítulo 326
Camila no podía entender cómo habían llegado las cosas hasta este punto, perdida en sus pensamientos.
Pronto, el ascensor llegó a su piso.
Mientras caminaba hacia su habitación, Camila pudo ocultar sus emociones.
Y en el momento en que entró en la habitación, percibió un aroma a comida.
Ella pensó que Brandon había pedido la cena, pero cuando llegó al comedor, vio una mesa llena de platos deliciosos y una figura esbelta trabajando en la cocina abierta.
—¿Cocinaste tú estos platos? —Camila se quedó atónita un rato ante el familiar olor a comida—. ¿Brandon? —preguntó Ella.
—¡Has vuelto! —Brandon se giró para mirarla antes de continuar—. Pensé que estarías harta de la comida del hotel, así que les pedí que me enviaran algunos ingredientes para cocinar. Espero que te gusten los platos.
Camila estaba a punto de llorar, pero fingió indiferencia y respondió:
—¡No sabía que cocinabas! ¡Guau! Todo huele tan bien, que deben estar deliciosos. ¡Qué ganas de probarlos!
Dicho esto, tom