Capítulo 12

Erior.

La cordura la perdí al apenas entrar a la habitación del hotel. No tuvimos que decir ni una palabra, ella me empujo sobre la cama y quitó mis pantalones. Yo la tome por la cintura y creo que ni cuenta se dio cuando ya estaba completamente desnuda, vibrando cada que pasaba la lengua por su anatomía, cada que mordía y lamía sus senos. 

Mia es una exquisitez que espero solo yo pueda disfrutar siempre, hasta el día de mi muerte.  

Gime y la arrojo sobre la cama, quito mi camisa y ella ríe tapando su cara. Le gusta lo que ve, pero le avergüenza que la vea desnuda. Excelente, eso me hace poner más duro. 

Muerdo su cuello, gime.&nb

Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App