JULIETTE MONTGOMERY
Los médicos decidieron que Samantha sería sometida a la cesárea el día viernes y eso es algo que aumenta la tensión de la familia Ulibarri con cada día que pasa.
He acompañado al demonio a la clínica cada día cuando terminamos de trabajar y a nuestro modo los dos intentamos brindar contención sin éxito. Mi manera es más suave que la de Brad al menos porque él con humor intenta disminuir la tensión pero nadie está de ánimos para reír en un momento tan delicado y sus buenas intenciones se prestan a malinterpretaciones.
Cuando llega el jueves, el demonio se va del hotel y yo me quedo haciéndome cargo de todo lo que ocurra laboralmente. A medida que las horas transcurren yo miro mí teléfono esperando noticias suyas para saber si Sally nació y del estado de salud de Samantha.
Cuando mi teléfono suena escucho al demonio decir que luego de una cesárea que duró más de lo debido, Sally nació. Desgraciadamente, debe de estar en una incubadora por algunas semanas,