leticia fontenelle

Llegué a casa el viernes y Guilherme no estaba, así que recibí un mensaje de Gabriel diciendo que mi rubia celosa me dijo que no me habla desde hace una semana, por mi amigo. También dijo que estaba en el bar con los chicos. Estoy tan triste por su actitud... cielos, incluso fui grosero con él en la empresa.

Maldita sea, me estaba poniendo de los nervios al no hablar, y mucho menos al mirarme.

Tenía muchas ganas de hablar con él, así que lo estaba esperando en la habitación donde dormía, pero terminé quedándome dormido. Terminé de despertarme cuando lo escuché hablar solo, me acerqué a él y miré el rostro que tanto amo, traté de hablar, pero ni siquiera me llamó.

Maldita sea, estaba a punto de agarrarlo, lo extrañaba mucho.

Vi que estaba borracho, lo levanté, le quité la ropa y me metí a la ducha con él. Me miró, se bañó como un rayo y se fue enseguida.

Joder, el domingo llega la gente y el martes va a ser el cumpleaños de Iris y me temo que mis celos se meten en pr