Esto es justo lo que haría Anna.
—Si me lo adviertes con anticipación, buscaré la forma de cooperar contigo.
Al decir esto, Bella le advirtió en tono frío: —Más te vale no intentar quedar bien con ambos lados y traicionarme. Si lo haces, ni siquiera tendrás la oportunidad de sobrevivir.
Al escuchar esto, Daniel se sorprendió. Bella había logrado adivinar sus pensamientos.
Antes, él la había subestimado. Ella no era solo una mujer rica y solitaria, su mente era mucho más ágil de lo que él pensaba.
Cuando colgó el teléfono, Daniel sacó un cigarrillo y lo encendió.
Marta le dijo: —Daniel, ¿puedes confiar en esa mujer? ¿No dijiste que los problemas de la empresa fueron causados por ella? Ahora está tratando de acercarse a nosotros, ¿no estará haciendo otra trampa para que caigamos?
Daniel respiró hondo. —Ella odia a Anna, no a nosotros. De todas formas, también hemos sido utilizados por Anna y hemos tenido que aguantar sus regaños. En lugar de eso, deberíamos dejar que Bella y Anna se enfr